Fundado en 1910

Boris Johnson se despide del número 10 de Downing Street: «Eso es todo, amigos»

En su último discurso como primer ministro británico, Boris Johnson recordó los logros de su Gobierno, y pidió apoyo a Liz Truss y a Ucrania

En unas horas, Boris Johnson dejará de ser primer ministro de Reino Unido para cederle el puesto a Liz Truss, su ministra de Exteriores.

En su último discurso, el polémico político compareció ante las cámaras, frente a la que fue su residencia estos últimos tres años. Y en un alegato plagado de referencias culturales, manifestó su apoyo a su sucesora, y recalcó la importancia de la unidad del Partido Conservador.

Delante de la característica puerta negra del Número 10 de Downing Street, Johnson afirmó confiar en la «compasión» de Liz Truss, y en que el Gobierno que hoy inaugura podrá guiar a Reino Unido a la solución del problema de la crisis energética.

En tono casual, empezó el discurso con la frase «eso es todo, amigos», y se describió a si mismo como «un motor cohete que ya ha cumplido su misión»: impulsar al Partido Conservador de cara a las elecciones de 2024.

Johnson procedió a enumerar sus logros: la gestión del Brexit, que su Gobierno «finalizó», la vacunación por coronavirus más rápida de Europa, y las mejoras en el ámbito económico. Según el británico, el sector privado florece, con inversiones «inundándolo» y compañías multimillonarias «germinando». Además, quiso recordar, el desempleo está en niveles «tan bajos como cuando yo tenía diez años y me pasaba el día jugando».

Putin no puede chantajearnos. Es un iluso si cree que puede hacerloBoris JohnsonAnterior primer ministro de Reino Unido

Recordó también su liderazgo a la hora de enviar armas a Ucrania, que podrían haber cambiado el curso de la guerra. Es cierto que el papel de Boris Johnson en Ucrania no ha pasado desapercibido. El propio Volodimir Zelenski, presidente del país invadido, lamentó la dimisión de su colega británico, que visitó Kiev en dos ocasiones y nunca desfalleció en sus ánimos a la resistencia ucraniana.

«Putin no puede chantajearnos. Es un iluso si cree que puede hacerlo», afirmó el ahora ex primer ministro británico.

Del apoyo a la dimisión

Boris Johnson asumió el cargo de líder del Partido Conservador en 2019, tras la dimisión de Theresa May. Se encontró con un Reino Unido al borde del Brexit, y no tardó en sufrir la presión de la pandemia, y de la guerra en Ucrania.

Como primer ministro, el carismático Johnson empezó con el apoyo entusiasta del electorado, y llegó a cosechar votos en zonas del país ancestralmente Laboristas. Sin embargo, la pandemia lo cambió todo. El principio del fin comenzó al descubrirse que su gabinete se había pasado el confinamiento celebrando fiestas en Downing Street, delito por el cual Johnson recibió una multa.

Los británicos denunciaron supuestos «fracasos de liderazgo» en su primer ministro, que finalmente se enfrentó al rechazo de su propio Partido, y tuvo que dimitir a regañadientes.

«Somos un Reino Unido entero e íntegro. Nuestra unión es tan fuerte, que aquellos que quieran romperla nunca lo lograrán», terminó su discurso. De esta manera, utilizó sus últimos momentos bajo los focos para condenar el referéndum de independencia que Escocia está cocinando para octubre de 2023.