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Pedro Sánchez junto al presidente de Colombia, Gustavo Petro

Pedro Sánchez junto al presidente de Colombia, Gustavo PetroEFE

Colombia

Petro rechaza la oferta de Sánchez y pedirá a Maduro ser el garante de la negociación con el ELN

El Gobierno de Pedro Sánchez ofreció que España pudiera ser la sede de futuras negociaciones de paz con los guerrilleros del ELN

En sus visitas oficiales a Colombia tanto el presidente de Chile, Gabriel Boric, y el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, reiteraron su apoyo para acompañar el eventual proceso de negociaciones con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Sin embargo, este martes ha trascendido que el Gobierno del exguerrillero Gustavo Petro ha preferido solicitar al régimen de Nicolás Maduro ser el garante de la negociación de paz con el ELN.

Fuentes de la presidencia colombiana le confirmaron al diario El Tiempo que Petro le pedirá a Venezuela ser garante de las eventuales negociaciones con el guerrilla que persiste en aterrorizar al país sudamericano.

Petro y Maduro han restablecido relaciones diplomáticas, luego que en 2019 el Gobierno del expresidente Iván Duque reconociera la presidencia interina del opositor Juan Guaidó.

Para Petro, la dictadura de Maduro le brindaría mejores condiciones y garantías para las negociaciones que las ofrecidas por una democracia como España.

ELN confiado en las negociaciones

El pasado 10 de septiembre se conoció que el ELN confía en que las negociaciones de paz puedan comenzar en cuestión de «semanas».

En una entrevista con la agencia Efe en La Habana el negociador del ELN, Israel Ramírez Pineda, alias 'Pablo Beltrán', explicó que ambas partes están actualmente preparándose para iniciar los diálogos.

«Yo pienso que (en cuestión) de semanas», afirmó Ramírez Pineda, uno de los máximos jefes del mayor grupo guerrillero en activo de Colombia luego de la desmovilización de las FARC con el Acuerdo de Paz de 2016.

Ramírez Pineda consideró además probable que se mantenga el modelo de «sedes rotativas» con el que empezaron estas conversaciones en 2017, de tal forma que aunque el diálogo comience en La Habana, pueda pasar posteriormente a algún otro país.

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