Uno de los paramilitares que participó en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 en Washington
Estados Unidos
La CIA conocía y no advirtió que había un plan para asaltar el Capitolio
La Agencia Central de Inteligencia, según pruebas presentadas en el Congreso americano, supo de la existencia del ataque que sufriría El Capitolio, al menos una semana antes
El Congreso estadounidense ha llegado a la conclusión de que Donald Trump tenía previsto incitar a sus seguidores a asaltar el Coliseo semanas antes de las elecciones.
La CIA, según los documentos facilitados a la Cámara, disponía de información que permitiría haber reaccionado con antelación a los sucesos de aquel 6 de enero, según público The Washington Post.
A finales de diciembre, la CIA recibió información acerca de un supuesto grupo extremista cuyo objetivo era sembrar el caos total en el Capitolio.
Este grupo, consciente de su gran volumen, tenía claro que no podría ser detenido por las fuerzas de policía en su intento de irrumpir en el Capitolio. El servicio de inteligencia recibió informes en los cuales se solicitaba que investigarán con celo esta posible amenaza.
En la audiencia se presentaron pruebas las cuales incluían a la CIA en el saco de agencias con conocimiento previo que no habían actuado de manera eficaz
Adam B. Schiff, miembro de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, criticó en la audiencia el desempeño de la agencia de inteligencia una vez fue conocedora de los posibles ataques de los que el edificio que alberga las dos cámaras iba a ser víctima, público The Washington Post.
«Como hemos visto, la CIA y otras agencias sabían de la posibilidad de un asalto mucho antes del discurso del presidente», dijo Schiff durante la audiencia.
Además, muchos miembros del servicio de inteligencia y de La Casa Blanca, negaron rotundamente el conocimiento de del posible asalto, circunstancia que Schiff catalogó como totalmente falsa.
En respuesta a estas declaraciones, el subdirector de la agencia de inteligencia, Faron K Paramore, señaló que el servicio de inteligencia estuvo en todo momento en contacto con las fuerzas de seguridad encargadas de Washington para sofocar un posible asalto a la integridad de la capital.
El 30 de diciembre, un miembro de la CIA advirtió sobre las amenazas que estaban teniendo lugar en foros de internet afines a Trump. En estas páginas web reinaba una tendencia muy violenta contra el partido demócrata, con el vicepresidente Mike Pence como centro de la diana.
Schiff señaló que la agencia , en la mañana del 6 de enero, sabía que muchos de los insurgentes que se encontraban presentes en las inmediaciones del Capitolio, portaban en esos momentos armas de fuego, gracias a informes proporcionados por el Cuerpo de Policía. «Es un delito portar un arma de fuego en una propiedad federal», agregó el político.
Entre las armas de fuego mencionadas se encontraban una Glock, una pistola o incluso un rifle de asalto. La policía detuvo al portador de esta última.
Al mismo tiempo, la CIA se topaba en las redes con amenazas de muerte hacia Pence. Estas citaban mensajes tan escalofriantes como «El vicepresidente es hombre muerto si no hace lo correcto».
Además, dos miembros de la agencia trataron vía correo electrónico la potencial amenaza que había en ese momento.
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«Con tantas armas incautadas hasta el momento, uno ya no sabe quien puede llevar una de ellas, y cuál es su objetivo» rezaba un mensaje. A este correo, su compañero respondió contundentemente: «No hay duda, la gente se dirigirá más tarde al Capitolio».