El presidente de Perú acusa a la Fiscalía de ser parte de «un golpe de Estado»
«No se puede impulsar un golpe de Estado manipulando o politizando a otro poder, como es el espacio del Ministerio Público», declaró Castillo a la televisión estatal
El presidente de Perú, Pedro Castillo, reiteró este jueves que la denuncia de la Fiscalía que puede costarle el cargo es parte de «un golpe de Estado», y rechazó de nuevo las acusaciones de que lidera una organización criminal en su gobierno.
«No se puede impulsar un golpe de Estado manipulando o politizando a otro poder, como es el espacio del Ministerio Público», declaró Castillo a la televisión estatal durante una gira de trabajo por el interior del país. «Lo que rechazamos (de la Fiscalía) es crear testigos, querer orquestar (una denuncia) diciendo que Pedro Castillo es jefe de una red criminal», agregó.
Castillo calificó la denuncia constitucional que presentó al Congreso el martes en su contra la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, como un «error» que está a tiempo de ser rectificado. La tesis de la fiscalía es que el mandatario dirige una red de corrupción de lavado de activos y de concesión de contratos de obras públicas, y que está integrada por su entorno familiar y político. Es la primera vez que la Fiscalía denuncia a un presidente en activo de Perú.
La Subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Congreso, primera valla del proceso que puede llevar a un antejuicio, empezará a evaluar el pedido el viernes en un proceso que tomará al menos dos semanas. Si la denuncia es declarada procedente se iniciará un antejuicio político a Castillo, que puede durar entre dos y tres meses.
El pleno del Congreso es la única instancia que puede decidir la suerte del presidente, que fue elegido el año pasado para gobernar hasta julio de 2026.
La denuncia fiscal incluye a dos exministros acusados de tráfico de influencias: Juan Silva, extitular de Transportes y Comunicaciones, y Geiner Alvarado, extitular de Vivienda, a quienes se sindica como parte de la organización que supuestamente dirige Castillo desde la presidencia.