311 días de guerra en Ucrania
Estos son los pronósticos de los expertos de El Debate para la guerra en Ucrania en 2023
A lo largo de 2022 y desde el inicio de la invasión de Vladimir Putin a Ucrania, El Debate ha consultado con experimentados analistas para descifrar las estrategias militares en el campo de batalla y las variables que pueden determinar el futuro de la guerra.
310 días de guerra en Ucrania
Zelenski y Putin realizan un balance 'positivo' de 2022, el año de la guerra
Normalmente, el inicio de un año nuevo está lleno de buenos deseos y especialmente para los ucranianos seguramente el mayor deseo sea recuperar la paz. Pero ¿Cuál es el pronóstico de la guerra en Ucrania para este 2023? A continuación lo que opinan nuestros expertos.
Juan Rodríguez Garat
Ucrania no va a ganar la guerra en 2023. Es probable que recupere algunos territorios hoy ocupados, quizá en Lugansk y en el sur, pero no logrará expulsar a los rusos de sus puntos fuertes: Crimea y las capitales rebeldes del Donbás.
Rusia tampoco va a ganar la guerra. Su ejército ha fracasado en el esprint por Ucrania, y Putin, que sabe que los bombardeos de las ciudades ucranianas no van a doblegar a su enemigo, solo espera ya que su suerte mejore en la carrera de fondo. Por alguna razón, cree o finge creer que el pueblo ruso va a aguantar más que el ucraniano. Se equivoca, pero su error no se hará evidente en el plazo de un año.
¿Habrá entonces acuerdo? Imposible también. Ucrania no cederá territorio alguno y Putin quemó sus naves cuando se anexionó formalmente las regiones ocupadas. ¿Qué queda entonces? La continuación del forcejeo sin que ninguno de los contendientes tenga esperanzas de alterar decisivamente el resultado. Períodos así, en baloncesto, se llaman minutos de la basura. Pero serán unos minutos que a todo el mundo se le van a hacer eternos.
Carmen Martínez Castro
Ucrania ya ha conseguido algo inimaginable cuando comenzó la invasión, que es plantarle cara a Rusia y disputarle la victoria casi un año después. Zelenski ha creado un sentimiento nacional fortísimo que encarecerá mucho cualquier solución pactada. Esa es una de las razones por las que creo que la guerra va para largo mientras Ucrania mantenga el apoyo de EE.UU.
Precisamente la visita de Zelenski a Washington tenía como objetivo taponar la fatiga por la guerra y las maniobras para empezar a recortar la ayuda económica y militar a Ucrania. Es cierto que la prioridad de la política de demócratas y republicanos es China, pero si EE.UU. quiere seguir siendo una la potencia hegemónica del mundo libre no puede desentenderse de la guerra que Putin ve como el partido de vuelta de la Guerra Fría.
Gustavo Morales
Rusia no es una superpotencia, se deduce de los fallos de logística y la desmotivación de sus tropas, que le ha llevado a traer chechenos, y del cambio de estrategia: primero a por Kiev y, tras el fracaso, a por la zona sudoriental del país.
Zelenski ha hecho una magnífica operación de relaciones públicas internacionales y jamás podrá pagar la ayuda recibida, aunque ha maltratado a su oposición. Las alianzas de Moscú con China, Siria e Irán se basan únicamente en un enemigo común.
José María Ballester
A Vladimir Putin le interesa convertir la guerra en un conflicto prolongado, de fuego lento: pese a las pérdidas militares, tiene mucho que ganar sosteniendo la presión agobiante -militar y energética- sobre Ucrania y manteniendo en vilo a Occidente. Solo podría cambiar de opinión ante un deterioro grave de la situación interna en Rusia.
Ramón Pérez-Maura
Parecía imposible que la Unión Soviética se retirase de Afganistán. Lo hizo. Antes de su derrota en Ucrania, Rusia empleará armas nucleares tácticas. Y entonces todos se volverán en su contra, hasta China, por la ruptura del equilibrio que eso implica.
Aquilino Cayuela
Durante siglos, el invierno ha favorecido a Rusia, ya que una sucesión de poderosos ejércitos (Suecia, la Francia Napoleónica o la Alemania nazi) han sucumbido por un equipamiento inadecuado y unas líneas de suministro y preparación deficientes. Pero en esta ocasión no es Rusia la invadida sino la invasora, no es su propio territorio y hay pocas posibilidades que los defensores ucranianos se quiebren.
La guerra se prolongará y Rusia intensificara sus ataques contra la red energética y su vulnerable población civil. Ellos soportarán el mayor sufrimiento, en los meses más duros del año. Nos queda por delante una larga guerra de desgaste.