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Rishi Sunak, líder conservador y primer ministro británicoStefan Rousseau / AFP

Reino Unido

Rishi Sunak promete enfrentar «sin trucos, ni ambigüedades» el caos del Reino Unido en 2023

En su primer discurso del año, el premier británico prometió reducir la inflación, promover el crecimiento, reducir la deuda, contener la inmigración ilegal y mejorar la sanidad pública

Rishi Sunak, primer ministro de Reino Unido, ha inaugurado el año con un discurso repleto de promesas. Desde Londres, se dirigió a los británicos para afirmar que sus objetivos «representan las prioridades» tanto del Gobierno como del pueblo.

Sus promesas llegan durante un momento difícil para el país: las huelgas se acumulan mientras que la crisis económica se agudiza.

Sunak, líder del Partido Conservador desde el pasado octubre, delineó una serie de cinco «prioridades»: la primera es reducir la inflación a la mitad. La segunda será favorecer el crecimiento de la economía británica. La tercera, asegurarse de que la deuda nacional baja a lo largo del año.

Su cuarto objetivo será reducir las listas de espera de la NHS, la sanidad pública. Y en su quinta, y última promesa, implementará legislación adicional en torno a los cruces del Canal de la Mancha, para que las personas que entren en Reino Unido de forma ilegal sean detenidas inmediatamente.

«Sin trucos, ni ambigüedades. Cumpliremos estas promesas, o no las cumpliremos. Recuperaremos la confianza del pueblo, o no la recuperaremos. Pero pido que sean ustedes quienes juzguen nuestros esfuerzos y los resultados que logremos», terminó Sunak, en palabras dirigidas a los británicos que, dentro de dos años, celebrarán elecciones generales.

Reducir la inflación

Según el periódico The Times, la promesa de Sunak de reducir la inflación se alinea con las predicciones de las principales instituciones económicas británicas. El impacto del aumento en los costes de comida y energía ya se incluyó en la tasa de inflación actual, de forma que la mayoría de los economistas esperan que esta baje a lo largo del 2023.

De momento, la inflación es del 10.67 %, pero tanto el Banco de Inglaterra, como la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria auguran que caerá a un 5.2 % a finales del 2023.

El crecimiento económico

Para impulsar el crecimiento de la economía de Reino Unido, Sunak afirmó que quiere dar prioridad a la innovación. Este objetivo servirá de solución a problemas «como el reto de las emisiones cero».

«Cuanto más innovamos, más crecemos», aseguró el premier conservador. Para lograr un mayor crecimiento, el Gobierno debe convertir la economía británica «en la más innovadora del mundo».

La Oficina de Responsabilidad Presupuestaria predijo que, aunque la economía de Reino Unido decrecerá un 1.4 % más a lo largo del año, volverá a crecer de nuevo en 2024, a tiempo para cumplir la promesa de Sunak antes de las elecciones generales de 2025.

Reformar la NHS

El Servicio Nacional de Salud (NHS) británico vive una de sus peores crisis. La situación es tan precaria que las enfermeras celebraron una huelga a principios de diciembre, hito histórico.

El primer ministro ansía resolver el cúmulo de pacientes atascados en listas de espera interminables, y quiere ofrecer más control al paciente. Según sus objetivos, los británicos deberían tener más acceso a la información burocrática del servicio de sanidad público. Además, quiere incrementar la flexibilidad laboral de los empleados sanitarios.

Reducir la deuda nacional

El plan fiscal que anunció el Partido Conservador el pasado noviembre negó cualquier esperanza de una caída de la deuda nacional. En su lugar, la iniciativa fiscal consistió en rebajar la deuda en proporción al PIB. Ahora será de cinco años el plazo para reducir la deuda, mientras que antes era de tres.

Legislar los cruces del Canal

Implementar leyes adicionales para castigar y reducir la inmigración ilegal es la parte más sencilla de esta promesa de Sunak. Será más complicado devolver a los inmigrantes del canal de la Mancha a sus países de origen, ya que muchos de ellos provienen de regiones peligrosas y están categorizados como solicitantes de asilo.

La solución prevista por Reino Unido, durante el Gobierno de Boris Johnson, fue deportar a los inmigrantes a Ruanda mientras estos esperan a ser procesados. Sin embargo, la Corte Europea de Derechos Humanos ya se interpuso una vez en esta iniciativa.