Pakistán pedirá ayuda a Teherán y Kabul para detener los ataques de los talibanes paquistaníes
El gobierno paquistaní le pedirá al líder supremo de los talibanes de Afganistán que controle a los militantes de ese movimiento en Pakistán después de que un ataque suicida matara a más de 80 personas en un cuartel de policía, informaron este sábado las autoridades.
Desde que los talibanes regresaron al poder en Afganistán, Pakistán ha registrado un aumento de atentados en regiones fronterizas con ese país, de terreno muy escarpado.
Los investigadores acusaron al grupo de talibanes paquistaníes Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP), el más destacado en la zona, de la explosión perpetrada el lunes en una mezquita de un cuartel de la policía de Peshawar que dejó 84 muertos.
Los talibanes paquistaníes comparten ideales con los talibanes afganos, liderados por Hibatullah Akhundzada, que dirige el país desde un lugar secreto situado en la ciudad de Kandahar, en el sur.
Un consejero especial del primer ministro paquistaní Shehbaz Sharif, Faisal Karim Kundi, afirmó que enviarán delegaciones a Teherán y a Kabul para «pedirles que garanticen que sus territorios no son utilizados por terroristas contra Pakistán».
Un policía paquistaní de alto rango de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, donde se produjo el atentado del lunes, declaró a Afp que la delegación mantendría «conversaciones con el mandamás».
«Cuando decimos mandamás, queremos decir (...) el jefe de los talibanes afganos Hibatullah Akhundzada,» dijo, pidiendo el anonimato.
El miércoles, sin embargo, el ministro talibán de Relaciones Exteriores de Afganistán, Amir Khan Mutaqi, advirtió que Pakistán no debería «culpar a otros».
Deberían ver los problemas que tienen en casa. No deberían acusar a AfganistánMinistro talibán de Relaciones Exteriores de Afganistán
Durante los 20 años de intervención estadounidense en Afganistán, Pakistán fue acusado de ofrecer protección a los talibanes afganos pese a que, oficialmente, Islamabad reafirmara su alianza militar con Estados Unidos.
Pero desde que el movimiento ultraconservador volvió al poder en Kabul en 2021, las relaciones con Pakistán han empeorado, en parte por el resurgimiento del grupo Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP).