Berlusconi dinamita la política exterior de Meloni al atacar a Zelenski

El ex primer ministro Silvio Berlusconi ha causado un terremoto dentro del gobierno de coalición de partidos de derecha en Italia, encabezado por Giorgia Meloni, al realizar un ataque frontal contra el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.

Berlusconi, líder de Forza Italia, una de las tres patas del gobierno italiano junto con La Lega de Matteo Salvini y Fratelli d’Italia de la presidente del consejo de ministros, aseguró que «si hubiese sido yo el presidente del consejo, nunca habría ido a hablar con Zelenski, porque estamos asistiendo a la devastación de su país y a la aniquilación de sus soldados y sus civiles».

Si hubiese sido yo el presidente del consejo de ministros, nunca habría ido a hablar con ZelenskiSilvio BerlusconiEx primer ministro de Italia

Berlusconi criticaba así por el encuentro que Giorgia Meloni mantuvo con el presidente ucraniano el pasado 9 de febrero en Bruselas durante la celebración del Consejo Europeo.

Zelenski pronunció entonces un discurso ante el Parlamento Europeo y mantuvo varias reuniones con líderes de la Unión Europea.

Con sus palabras, pronunciadas tras salir de votar en las elecciones regionales de Lombardía, il cavaliere, ha reventado la política exterior del gobierno de Meloni.

Berlusconi, que durante su etapa de primer ministro italiano mantuvo una estrecha cooperación con Rusia y que todavía hoy presume de mantener amistad con el presidente Vladimir Putin, acusó a Zelenski de provocar la guerra.

«Bastaba con que pusiera fin a los ataques a las dos repúblicas autónomas del Donbás y nada de esto habría sucedido. Por lo tanto, juzgo muy negativamente el comportamiento de este señor», afirmó en sus declaraciones ante los medios.

«Para la llegar a la paz diría que hace falta que el señor presidente americano coja a Zelenski y le diga: ‘A tu disposición, después del fin de la guerra, hay un Plan Marshall para reconstruir Ucrania, un Plan Marshall de 7.000, 8.000, 9.000 millones de dólares. Con una condición. Que mañana ordenes el alto el fuego, porque nosotros, desde mañana, no te vamos a dar más dólares y no te daremos más armas’. Sólo algo así puede convencer a este señor para que llegue a un alto el fuego».

El gobierno de Meloni ha tratado de contener los daños provocados por la salida de tono de Berlusconi y ha difundido un comunicado en el que defiende que «el apoyo a Ucrania por parte del gobierno italiano es firme y decidido».

En el mismo partido de Berlusconi, Forza Italia, las palabras de Berlusconi han causado estupor. El ministro de Exteriores de Italia y coordinador de Forza Italia, Antonio Tajani, difundió un tuit en donde corregía a su jefe de filas.

«Forza Italia se ha pronunciado desde siempre a favor de la independencia de Ucrania, de Europa, de la OTAN y de Occidente. En todos los foros continuaremos votando con nuestros aliados de gobierno respetando nuestro programa», señaló.

Tajani hacía referencia así al programa de gobierno firmado por las tres fuerzas de derecha, que consagra como principio de la política exterior italiana el atlantismo y el apoyo a Ucrania frente a la agresión rusa, así como la condena al régimen de Putin por la invasión y el respaldo de las sanciones internacionales contra el Kremlin.

Podolyak continuó: «Que se quite la máscara y que diga públicamente que está a favor del genocidio del pueblo ucraniano».

Más duro se mostró el portavoz del ministerio de Exteriores de Ucrania, Oleg Nikolenko: «Las acusaciones insensatas de Berlusconi contra Zelenski son un intento de besar las manos de Putin, ensangrentadas hasta la náusea».

Lejos de rectificar, Berlusconi se reafirmó en su interpretación de los acontecimientos en Ucrania: «Hace falta un Plan Marshall para reconstruir Ucrania, poner fin a las masacres y pasar página de una vez», defendió en su perfil de Twitter.