El moderno avión de combate F-35 que ya encargó Grecia son lo que quiere también Turquía
Turquía sube el precio al ingreso de Suecia y Finlandia a la OTAN: ya no quiere F-16 sino modernos F-35
30 senadores de EE.UU. se han opuesto a la venta de aviones de combate a Turquía y a cambio piden que Ankara ratifique la adhesión de Finlandia y Suecia
el beneplácito de Ankara es necesario para el ingreso de Suecia y Finlandia a la OTAN y el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, ve en ello la oportunidad de presionar para conseguir sus ambiciones: renovar su fuerza aérea para equipararla a la de Grecia.
Washington espera que Erdogan acepte finalmente la expansión de la Alianza Atlántica y levante el bloqueo al ingreso de estos dos nuevos países para fortalecer el flanco Este, especialmente con los países nórdicos.
Turquía, a cambio, estaría exigiendo a Estados Unidos resolver una vieja disputa: la adquisición de aviones de combate de fabricación estadounidense para la modernización de su fuerza aérea.
En 2019, Washington anunció la suspensión de la venta de dos mil millones de dólares de aviones avanzados F-35 a Ankara después de que se llevara a cabo la compra a Rusia de sistemas de misiles tierra-aire S400 de última generación.
Desde entonces, Estados Unidos ha retrasado indefinidamente la venta de un paquete de modernización del avión de combate F-16 en medio del reclamo de congresistas estadounidenses que quieren que Turquía apruebe primero el ingreso de Finlandia y Suecia a la Alianza Atlántica.
Erdogan y Biden conversan durante la cumbre del G20 en Bali
Cagri Erhan, miembro del Consejo Presidencial de Seguridad y Política Exterior de Erdogan, dijo a Newsweek que «los F-16 no pueden en ningún caso sustituir a los F-35» porque «incluso la propia fuerza aérea de Estados Unidos ya no está comprando F-16».
Erhan argumentó que solo los últimos aviones deberían estar disponibles para Turquía, especialmente porque los F-35 ya fueron vendidos a Grecia, un aliado de EE.UU. en la OTAN, pero rival de Turquía por las disputas territoriales en el mar Egeo.
¿Por qué Turquía debería aceptar F-16 en lugar de F-35, mientras que Estados Unidos está vendiendo F-35 a Grecia?Miembro del Consejo Presidencial de Seguridad y Política Exterior de Turquía
Ankara amenaza con buscar otros proveedores para adquirir las aeronaves que necesita. De hecho, Erdogan ya advirtió que estaba buscando comprar aviones a China y Rusia.
«Los mercados de armas tienen un número creciente de proveedores sofisticados», dijo Erhan. «Desde aliados norteamericanos y europeos de la OTAN hasta potencias asiáticas, al menos 15 compañías están produciendo aviones de combate modernos», agregó el funcionario turco.
Presiones en Washington
En Washington, algunos congresistas influyentes han pedido al presidente Joe Biden que no siga tampoco con la venta a Turquía de los F-16. La principal voz proviene de las propias filas demócratas, el presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Bob Menéndez.
Otros 29 senadores enviaron una carta a Biden el mes pasado justificando su oposición a la venta de F-16 a Turquía con la negativa del país a ratificar la membresía de Finlandia y Suecia en la OTAN.
Su actitud no ayudó ni ayuda a fortalecer la alianza euroatlánticaMiembro del Consejo Presidencial de Seguridad y Política Exterior de Turquía
Según Erhan,«el verdadero problema no es la vacilación de los legisladores estadounidenses para vender F-16 a Turquía, sino continuar bloqueando el suministro de F-35» como resultado del cabildeo antiturco, incluida una historia de casi 60 años de «comportamiento sesgado y no amistoso de ciertos grupos políticos en la política estadounidense».
Un asunto de Derechos Humanos
Pero Menéndez, por su parte, ha dicho que el problema se deriva incluso más allá del bloqueo turco a la ampliación de la OTAN.
«Como he dejado claro en repetidas ocasiones, me opongo firmemente a la venta propuesta por la Administración Biden de nuevos aviones F-16 a Turquía», dijo Menéndez a Newsweek.
El senador demócrata por Nueva Jersey añadió que «el presidente Erdogan continúa socavando el derecho internacional, ignorando los derechos humanos y las normas democráticas, y participando en un comportamiento alarmante y desestabilizador en Turquía y contra los aliados vecinos de la OTAN».
«Hasta que Erdogan cese sus amenazas, mejore su historial de derechos humanos en su país, incluso liberando a periodistas y opositores políticos, y comience a actuar como debería hacerlo un aliado de confianza», agregó Menéndez, «no aprobaré esta venta».
