El primer ministro de Hungría, Viktor Orban
379 días de guerra
Viktor Orban alerta del riesgo de una III Guerra Mundial: «Nunca fue tan grande»
El primer ministro de Hungría está preocupado por la deriva que está tomando la guerra y acusa a Occidente de tener una «fiebre bélica» por mandar armas para apoyar a los ucranianos
Viktor Orban suele ser la piedra en el zapato del frente unido en la Unión Europea, cuando se trata de, entre otros asuntos, la guerra de Ucrania. El presidente de Hungría ha criticad abiertamente la política de los 27, está en contra de las sanciones a Rusia y lleva tiempo insistiendo en que hay que poner fin a este enfrentamiento bélico.
Sin expresarlo de forma directa, Orban parecería que sugiere que hay que imponer una paz a Zelenski y cederle el Donbás a Putin. Esa hipótesis es la que el presidente de Ucrania descarta de plano.
El primer ministro de Hungría está preocupado por la deriva que está tomando la guerra y acusa a Occidente de tener una «fiebre bélica» por mandar armas para apoyar a los ucranianos. Decisiones que, a su juicio, acercan cada vez más la posibilidad de que todo se vaya de las manos y estalle una III Guerra Mundial.
El primer ministro añadió que «los líderes de Occidente viven en una fiebre bélica» por enviar a Ucrania armas que él considera cada vez más peligrosas, como aviones de combate.
Orbán opinó -informa Efe- que pronto se planteará el envío de soldados a Ucrania y agregó que el mundo está muy dividido en relación con la guerra.
Los países africanos, los turcos y los chinos piden negociaciones de pazViktor Orban
Así, dijo que frente a la postura de Occidente de respaldar a Ucrania frente al ataque ruso, «los países africanos, los turcos y los chinos piden negociaciones de paz», porque muchos sufren las consecuencias de la guerra, como la inflación y los problemas de abastecimiento de alimentos.
El Gobierno húngaro es el mejor aliado de Moscú en la Unión Europea (UE) y tanto Orbán como otros ministro aseguran que la inflación que enfrentan los países comunitarios se debe a las sanciones contra Rusia por la invasión de Ucrania, que consideran «erróneas».
«Sin las sanciones, la inflación empezaría a reducirse al instante», opinó en este sentido Orbán.
Hungría es el único país comunitario que no ha aprobado aún la entrada de Suecia y Finlandia y la OTAN, que han pedido su adhesión en reacción a la invasión rusa de Ucrania.
