Petro arremete contra la «libertad que vende el neoliberalismo» delante de Almeida

Tras estrechar la mano del alcalde José Luis Martínez Almeida, el presidente de Colombia, Gustavo Petro saludó a parte de la comunidad colombiana que lo esperaba en las afueras de la casa de la Villa de Madrid donde el alcalde en nombre del consistorio le entregó la Llave de Oro de la Ciudad.

Almeida evocó «el espíritu de acogida de la ciudad de Madrid» y el vínculo especial de Simón Bolívar, primer presidente de la Gran Colombia, con la capital española para sobreponer la relación entre ambas naciones a «cualquier disputa».

El alcalde de la capital también elogió «la democracia colombiana y la resistencia ante sus enemigos para consolidar su Constitución». Al finalizar su discurso de bienvenida, Almeida entregó la llave de la ciudad a Petro "en nombre de la admiración y el respeto al pueblo de Colombia» por parte de los madrileños.

Petro por su parte, recordó cuando fue alcalde de Bogotá y le tocó «gobernar una ciudad hija de Madrid, pero que existía antes que la propia Madrid» remontándose a sus orígenes precolombinos.

El líder izquierdista reivindicó que hasta el Virreinato de Nueva Granada llegaron clandestinamente nuevas ideas que inspiraron la guerra de independencia y provocaron un desencuentro entre Colombia y España, pero que ahora, «sin estar subordinados ni subyugados se encuentran de nuevo».

Según Petro, «Madrid le dio un ejemplo al mundo de resistencia ante el fascismo» mediante una «voluntad popular y terquedad rebelde que demostró que un último esfuerzo valía la pena».

«La libertad no es como la venden»

El mandatario colombiano fue más allá en un discurso cargado ideológicamente al señalar que la «libertad no es como la venden ahora, entendida como la capacidad de producir y vender lo que se quiera».

«La crisis climática nos dice que no podemos comprar ni vender todo y cuestiona el centro del pensamiento neoliberal» agregó Petro reiterando que «no se pueda ser libre si no se supera las necesidades básicas de las personas».

Finalmente, Petro señaló que «bajo estos nuevos aires de libertad y en un nuevo terreno» España tiene un gran papel.

«España tiene mucho que decir, en un encuentro entre Europa y América Latina» y podría plantear un influjo con la necesidad de cambiar« pues si no cambiamos no sobrevivimos».

«La presidencia española de la Unión Europea y América Latina, deben hablar de cambio, libertad, democracia y vida que se están convirtiendo en sinónimos» concluyó Petro ante el consistorio madrileño.