Albares promete a 101 apátridas nicaragüenses que recibirán «en breve» la nacionalidad española
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se reunió este jueves en Washington con un grupo de opositores nicaragüenses despojados de su nacionalidad ante quienes prometió que aquellos que soliciten la nacionalidad española la recibirán «en breve» y que la oferta seguirá en pie el tiempo que sea necesario.
El Consejo de Ministros concedió en su reunión extraordinaria de este jueves la nacionalidad española a un primer grupo de 14 nicaragüenses desterrados por la dictadura de Daniel Ortega, una solicitud que han presentado hasta ahora 101 personas del un total de 316 que fueros despojados de su nacionalidad.
«Evidentemente todas ellas van a ser respondidas favorablemente en un breve plazo», dijo a Efe el ministro al terminar la reunión en la capital estadounidense, en la que confirmó que la oferta «seguirá abierta tanto tiempo como sea necesario para estas personas» y para otras que en el futuro sean despojadas de su nacionalidad.
Albares se reunió con una docena de ellos en la Embajada de España en Washington, donde los nicaragüenses le expresaron su agradecimiento por la oferta y expresaron algunas inquietudes, como las vías para encontrar empleo en España o para reunificarse con sus familiares.
Sin importar donde residan
El ministro les explicó que la oferta para que se nacionalicen como españoles es independiente de su lugar de residencia, de manera que pueden mudarse a España, quedarse en Estados Unidos o trasladarse a países más cercanos a Nicaragua, como Costa Rica.
Por ahora, pueden pedir la ciudadanía española los 222 presos políticos nicaragüenses que fueron desterrados del país por Ortega el pasado febrero y enviados en avión a Washington, así como otros 94 opositores que también fueron despojados de su ciudadanía.
Preguntado sobre la situación política en Nicaragua, Albares respondió: «Nosotros queremos para todos los países de América Latina, sin distinción, lo mismo que queremos para España y para los españoles: Prosperidad, libertad, democracia y justicia social».
Entre los nicaragüenses que se reunieron con Albares estuvo Juan Sebastián Chamorro, precandidato a la Presidencia nicaragüense, que pasó 18 meses en prisión hasta que fue expulsado del país y enviado en avión a Estados Unidos.
«Fue una sesión de trabajo, pero también de agradecimiento al ministro por todo lo que han hecho por nosotros en un momento de represión de parte de la dictadura de Ortega», explicó Chamorro a Efe sobre el encuentro.
El líder opositor recordó que España fue el primer país que «solidariamente» ofreció a los apátridas su nacionalidad, un paso que posteriormente también dieron México, Colombia y Chile.
En el caso concreto de Chamorro, está consultando con sus abogados si pedir la ciudadanía española puede entorpecer su trámite de petición de asilo en Estados Unidos, una duda que comparten otros expresos políticos.
El líder opositor admitió que estar fuera de su país supone un «desafío» para mantener la lucha política, pero afirmó que seguirá denunciando a nivel internacional los abusos cometidos por Ortega y se mostró convencido de que acabará cayendo porque «todas las dictaduras que han existido en la historia del mundo han desaparecido».
«No me queda la menor duda de que vamos a regresar a una Nicaragua libre, democrática y justa», concluyó Chamorro.