Qatargate
La exeurodiputada Eva Kaili, procesada por el Qatargate, acusa a «España de fabricar pruebas» en su contra
Ex vicepresidenta de la Eurocámara asegura que se enteró de todo por la prensa y denuncia que espiaron a la Comisión que investigaba el caso Pegasus, verdadero «origen» de una causa fraguada, según ella
Dice que no sabía nada, que es inocente, que todo es un montaje, que las bolsas de dinero con miles y miles de euros, que descubrió la Policía en su casa, era de Antonio Panzeri, el ex eurodiputado socialista y principal procesado en el escándalo Qatargate, que la llevó a prisión. Sobre la maleta, también repleta de dinero, que le requisaron a su padre, asegura que tampoco sabe nada. Es Eva Kaili, una mujer que hace alarde de ingenuidad y asegura: «En España se han fabricado pruebas en mi contra».
Nunca me han ofrecido dinero de ningún país ni he sido sobornada. Tampoco de Rusia
En entrevista con el periódico El Mundo, la que fuera abanderada del socialismo griego en Bruselas, se defiende: «Nunca me han ofrecido dinero de ningún país ni he sido sobornada. Tampoco de Rusia, como alguien ha dicho. Se ha hecho para crear la sospecha. No puedo explicar el por qué de mi prolongada detención».
Kaili se queja de su arresto, primero en prisión y luego domiciliaria, «ha durado mucho más que la de las personas que estaban en el núcleo del caso. Me han separada de mi bebé durante cuatro meses. No pude ver a mi hija durante el primer mes. Otras reclusas pudieron, yo no.» Dicho esto, añade, «es una operación política basada en pruebas falsas»
Todo empieza con «Pegasus en Marruecos»
La ex vicepresidenta del Parlamento Europeo defiende su inocencia, en el mayor escándalo de la historia de la Eurocámara y asegura que el origen de todo es que ella estuviera, con el Comité, investigando el caso «Pegasus con Marruecos».
Se trata del programa de espionaje de intercepción de conversaciones de gobiernos del que Pedro Sánchez fue el único presidente europeo que hizo público haber sido víctima. Su cambio de política, improvisado e inconsulta, respecto a Marruecos desató una avalancha de especulaciones y la sospecha de supuestos chantajes por el contenido hallado en su teléfono móvil.
En sus declaraciones a El Mundo, Kaili insiste en que los países afectados en el escándalo de Pegasus eran «España, Francia, Bélgica, Marruecos y Francia» pero también se intentó involucrar a «Ecuador».
Enfocada en asuntos de «ciberseguridad» tras finalizar su baja por maternidad, la vicepresidenta destituida de la Eurocámara, recuerda el día que su marido, Francesco Giorgi, fue detenido y su automóvil incautado por lo que ella pensó que debía ser por «un accidente de tráfico».
De acuerdo a su relato, le dijeron que ella no tenía nada que ver, extremo que -insiste- vio ratificado en varias informaciones publicadas en el diario Le Soir, su principal fuente de informaciòn en este escándalo. «Además -advierte- yo tenía inmunidad diplomática».
Yo no reviso las cosas, las pertenencias de mi maridoPara justificar la bolsa de dinero que la Policía incautó en su casa
Preguntada por el dinero, recuerda: «En casa había una bolsa que Panzeri (el principal involucrado, socialista como ella y el resto de los procesados) había dejado aquí. Yo no reviso las cosas, las pertenencias de mi marido. Leí lo que publicó Le Soir sobre que había dinero en efectivo en mi casa e inspeccioné su despacho».
Miembro del PASOK, el partido socialista griego, Kaili recuerda que Panzeri era como «el mentor» de su marido. A lo largo de la entrevista se remite y reitera que se informó de los sucesos por la prensa, en concreto, por el mencionado diario belga. Como prueba de su austeridad anima al periodista de El Mundo: «Echa un vistazo a mi casa: no hay ni joyas ni oro».
Creo que el dueño del dinero debería dar explicacionesEn alusión a Panzeri
La Policía incautó en su vivienda un bolsón con 150.000 euros y a su padre le detuvieron en un hotel con miles de billetes en una maleta. «Creo que el dueño del dinero debería dar explicaciones», dice en alusión a Panzeri.
«Creemos que Marruecos, España, Francia y Bélgica» eran los países implicados en el supuesto espionaje a la comisión y a ella misma, advierte.
A renglón seguido, añade que investigarles, «es una violación de la legislación europea… Que miembros electos del Parlamento europeo sean sometidos a vigilancia de los servicios secretos debería suscitar mayores preocupaciones sobre el estado de salud de la democracia europea".
Dicho esto, se escandaliza: «va más allá de lo personal: tenemos que defender el Parlamento Europeo y el trabajo de sus miembros».
De acuerdo con sus reflexiones, Kaili piensa que la conexión del caso Pegasus con el Qatargate fue «la consecuencia de intentar montar un caso… Como se celebró el Mundial en Qatar hubo una excusa para cambiar de objetivo. Además, -reitera- se han falsificado pruebas en mi contra desde España sobre supuestas cuentas mías en Panamá con millones de euros que recibí del Gobierno de Qatar. Lo he denunciado -al particular que la acusó- por falsedad documental».