Biden y Sunak discuten en Downing Street la decisión de enviar bombas de racimo a Ucrania

Joe Biden, presidente de Estados Unidos, ya está en Londres antes de poner rumbo a Lituania para la cumbre de la OTAN. De hecho, se encuentra con Rishi Sunak, en el 10 de Downing Street abordando los temas de rigor. El más espinoso en este momento es la decisión de Estados Unidos de suministrar bombas de racimo a Ucrania, algo a lo que se opone el primer ministro británico.

El presidente de Estados Unidos aterrizó en el aeropuerto de Stansted el domingo por la noche, antes de ser trasladado en helicóptero a la residencia del embajador estadounidense en el centro de Londres.

La reunión entre Biden y Sunak, que es la sexta desde que Sunak asumió el cargo en octubre, ha sido en parte eclipsada por la decisión del presidente estadounidense de enviar municiones de racimo a Ucrania. Estas brutales armas están prohibidas en más de 100 países, incluido el Reino Unido, que además preside la convención que las prohíbe.

Gran Bretaña «desaconseja» el uso de municiones de racimo

El sábado pasado, Sunak afirmó que Gran Bretaña «desaconseja» el uso de municiones de racimo. Pero cuando se le presentó la oportunidad de recibir a Biden, aunque fuera durante una visita corta, aceptó, ya que quiere seguir reparando las relaciones entre el Reino Unido y Estados Unidos — que se deterioraron durante la presidencia de Donald Trump y los mandatos de Boris Johnson y Liz Truss.

Decisión «difícil»

Por su parte, el pasado domingo Biden explicó que la decisión de proporcionarle a Ucrania bombas de racimo había sido una decisión «muy difícil» para él. En declaraciones a la cadena CNN, afirmó que había evaluado la situación con aliados antes de tomar la decisión. Según Biden, las armas se proporcionaron porque Ucrania se estaba quedando sin munición en un momento crítico: sus tropas estaban en plena ofensiva y necesitaban superar las trincheras rusas.

La escala de Biden en Reino Unido precede a una cumbre de la OTAN que tendrá lugar en Vilna, Lituania, mañana martes. Es por lo tanto una pre-reunión entre dos de los líderes más importantes de la alianza.

Biden y Sunak dialogarán sobre Ucrania, y sobre el futuro de la alianza militar, a la que actualmente quieren unirse otros países. Sus puntos de vista son diferentes respecto a este tema, ya que Biden muestra reticencias respecto a la candidatura de Ucrania para unirse a la OTAN, mientras que Sunak podría apoyar una membresía acelerada. También podrían hablar sobre los desafíos que el Brexit ha planteado al proceso de paz en Irlanda del Norte.

Será la sexta reunión entre ambos líderes en solo seis meses. En junio, Biden recibió a Sunak en la Casa Blanca, comprometiéndose con la Declaración del Atlántico para cooperar en tecnologías avanzadas, energía limpia, y minerales críticos, para contrarrestar la influencia de China en el mundo.

Té y diplomacia

Tras reunirse con el primer ministro, Biden viajará al Castillo de Windsor, donde se encontrará con el Rey Carlos y presenciará un despliegue de pompa y ceremonia. Los Guardias Galeses interpretarán el himno nacional de Estados Unidos, y el presidente recibirá el saludo real antes de pasar a tomar el té con el monarca. Será su primer encuentro desde que el rey Carlos fue coronado el pasado mayo.

Después, asistirán a un foro de movilización de financiamiento climático, donde los principales líderes financieros y filantrópicos evaluarán qué clase de apoyo se puede ofrecer a los países más pobres. El objetivo es impulsar los esfuerzos para desbloquear capital privado, y fomentar iniciativas que incrementen el apoyo a las economías en desarrollo para realizar una transición a cero emisiones netas.

A pesar de ser breve — se espera que el Airforce 1 despegue a tiempo para llegar a Vilnius el lunes por la noche — la visita tiene aspectos positivos tanto para Biden como para Sunak, y llega en un momento particularmente oportuno para este último. Así lo han señalado observadores como Sir Kim Darroch, embajador británico en Estados Unidos de 2016 a 2019.

En declaraciones al periódico The Guardian, Darroch explicó que «todavía hay una fascinación por parte del público estadounidense con la realeza, por lo que esa imagen será útil para Biden. Además, la defensa es el único sector en el que Reino Unido sigue teniendo credibilidad con Washington; por eso, Biden querrá asegurarse de que Sunak será su defensor y aliado en la cumbre de la OTAN».

«Para Sunak, que ha tenido unas semanas malísimas, y se enfrenta a algunos retos políticos (como las elecciones parciales), será una oportunidad para mostrarse como líder mundial antes de una cumbre en la que se tomarán algunas decisiones importantes, incluyendo la solicitud de Ucrania para unirse a la OTAN», agregó el ex-embajador.