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Imagen de Émile difundida por las autoridades paraGendarmerie nationale Twitter

Francia

Francia contiene la respiración: sin rastro del pequeño Émile, de dos años, desaparecido hace dos días

El niño se encontraba de vacaciones con sus abuelos cuando desapareció y ya llevaría tres noches y dos días sin comida ni bebida

Desde hace dos días Francia no se despega del televisor. El país está conmocionado por la desaparición del pequeño Émile, de dos años, que se ha perdido en la zona montañosa de Vernest, al sureste de Francia.

El niño se encontraba allí de vacaciones con sus abuelos maternos. Los últimos dos testigos que se cruzaron con él aseguran que se lo cruzaron caminando completamente solo por la calle.

Tras dar la voz de alarma por la ausencia del menor, las autoridades pertinentes se pusieron rápidamente a trabajar en el caso. Se han barrido los bosques y campos cercanos en torno al núcleo rural, que está habitando tan solo por 25 personas, pero por el momento no se ha encontrado rastro del pequeño. Los edificios del pueblo y las casas de los vecinos también han sido registradas, pero no hay ninguna señal de Émile.

No se descarta ninguna hipótesis

El equipo de búsqueda está integrado tanto por bomberos y policías con sus perros rastreadores, como por voluntarios de la zona. Los civiles que han decidido contribuir activamente para esclarecer el caso llegan a doscientos, y se muestran muy impactados por la desaparición de Émile.

Los únicos datos que se tienen por el momento son que el pequeño se encontraba jugando en el jardín de la casa de sus abuelos y más tarde fue visto por los dos testigos en la calle. Después de eso se esfumó.

Rubio de ojos marrones

Los implicados en su búsqueda no pierden la esperanza, y seguirán indagando el paradero del niño rubio de ojos marrones que saluda desde la fotografía difundida por las autoridades. Pero a pesar de que no se descarta ninguna hipótesis, el panorama es desolador en el probable caso de que se haya perdido.

En este supuesto el niño ya habría pasado tres noches y dos días sin comida ni bebida. A esto se le suman las adversas condiciones de la zona, cuya área es montañosa y escarpada y se encuentra en plena ola de calor.