Fundado en 1910
Dymytry Shetsov, delegado de la Cruz Roja en Ucrania en la entrevista donde reconoce deportar niños ucranianos de las zonas ocupadas a Bielorrusia

Dymytry Shetsov, delegado de la Cruz Roja en Ucrania en la entrevista donde reconoce deportar niños ucranianos de las zonas ocupadas a BielorrusiaCaptura de pantalla de la TV publicada por Kiev Post

512 días de guerra en Ucrania

La Cruz Roja de Ucrania admite que deportó a niños de zonas ocupadas y los llevó a Bielorrusia

El gobierno de Zelenski pide una orden de detención internacional para el delegado de la organización, que a su vez anuncia la apertura de una investigación y toma distancia de lo sucedido

El escándalo en la tragedia de Ucrania está servido con el símbolo de la Cruz Roja Internacional en primera línea de fuego. La organización ha admitido que participó de deportaciones de menores de los territorios ocupados por Rusia y los llevó a Bielorrusia, donde impera el régimen de Alexander Lukashenko, aliado de Vladimir Putin.

Las reacciones no se han hecho esperar. El gobierno de Kiev ha pedido una orden de arresto internacional a la Corte Penal Internacional (CPI) para Dmitry Shevtsov, delegado de la Cruz Roja, mientras la propia institución ha tomado cartas en el asunto y ha anunciado una investigación exhaustiva.

Shevtsov, en su defensa, según recoge Kiev Post, argumentó que lo hicieron para protegerles y ayudarles a superar problemas de salud y el trauma de la guerra.

Dymytro Kuleba, Ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, exigió que la Corte Penal Internacional (CPI) emitiera una orden de arresto contra él tras «confesar públicamente el delito de deportación ilegal de niños de las áreas ocupadas de Ucrania». «Todos los responsables de robar a niños ucranianos deben rendir cuentas», tuiteó.

Shevtsov declaró en la televisión pública bielorrusa que la organización «ha participado, participa y participará activamente en esto», pero que lo hizo para que los niños «se curasen» y «se olvidasen del horror» de la guerra.

La CPI emitió en marzo una orden de arresto contra el presidente ruso, Vladímir Putin, como «presunto responsable» de la deportación ilegal de niños y su traslado de Ucrania a Rusia.

También emitió otra orden de arresto contra la comisionada presidencial para los Derechos del Niño en Rusia, María Lvova-Belova, que ha adoptado un menor de la ciudad ucraniana de Mariúpol

La oposición bielorrusa en el exilio acusó al régimen de Lukashenko de deportar ilegalmente a más de 2.100 niños ucranianos

La oposición bielorrusa en el exilio –recuerda Efe– acusó al régimen de Alexander Lukashenko de deportar ilegalmente a más de 2.100 niños ucranianos a la antigua república soviética, un crimen de guerra que ya ha denunciado ante la Corte Penal Internacional (CPI).

«Según los datos que logramos recopilar, desde septiembre de 2022 hasta mayo de 2023, más de 2.100 niños ucranianos fueron trasladados ilegalmente desde los territorios ocupados de Ucrania», asegura el exiliado exministro bielorruso de Cultura, Pável Latushko.

«El movimiento se llevó a cabo desde 15 ciudades ocupadas en territorio de Ucrania», indicó.

Cinco campamentos elegidos

El dirigente opositor explicó que los menores ucranianos son trasladados a cinco campamentos en Bielorrusia, cuatro de los cuales están en la región de Minsk y uno en la de Gómel.

«La decisión sobre la financiación, sobre la organización del traslado de los niños ucranianos a Bielorrusia, la toma personalmente (el presidente) Alexander Lukashenko (...)», afirmó.

El dinero para financiar la deportación forzosa de los niños sale del presupuesto de la Unión Estatal Rusia-Bielorrusia

El dinero para financiar la deportación forzosa de los niños sale del presupuesto de la Unión Estatal Rusia-Bielorrusia y los documentos relevantes han sido firmados por el propio Lukashenko.

«Tenemos números, fechas, copias de estos documentos. También tenemos documentos firmados por el secretario de Estado del Estado de la Unión, Dmitri Mézentsev», dijo Latushko.

Donetsk y Lugansk

Mezéntsev dijo en junio que unos 2.000 niños de las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk visitaron «sanatorios» en la región de Minsk, pero que esto se hacía acorde a los procedimientos legales y con el consentimiento de sus padres o tutores.

En los documentos recabados por la oposición, el funcionario ruso «indica cuántos niños sacaron (de Ucrania) y cuántos sacarán, que entre ellos hay huérfanos, su ruta y una serie de datos más que prueban la ilegalidad de estas acciones», subrayó Latushko.

De Bielorrusia a Rusia

Según el dirigente opositor también existen «pruebas de que estos niños están siendo reeducados en territorio de Bielorrusia» por parte de «los propagandistas rusos y bielorrusos, y varias organizaciones» a fin de cambiar la percepción de su patria.

Además, señaló a Efe, su equipo tiene «pruebas de que varios huérfanos, después de permanecer en Bielorrusia, fueron trasladados a Rusia para residir allí. Es decir, no regresaron a territorio de Ucrania».

comentarios
tracking