La junta militar de Níger retira las credenciales al embajador francés y ordena a la policía su expulsión

La junta militar en el poder en Níger desde el golpe de Estado del 26 de julio retiró las credenciales al embajador francés en el país, Sylvain Itté, e instruyó a la policía nigeriana para que «proceda a su expulsión», una vez transcurrido el plazo que le dio para salir del territorio nacional.

El Ministerio de Exteriores nigerino informa al departamento francés de Exteriores en una nota fechada el pasado martes de que Itté «ya no disfruta de los privilegios e inmunidades ligados a su estatus de miembro del personal diplomático de la embajada».

Por ello, añade que «las credenciales diplomáticas y los visados del interesado y de los miembros de su familia quedan anulados» y que «se ha instruido a los servicios de policía para que procedan a su expulsión».

La junta nigeriana ordenó el pasado 26 de agosto la expulsión de Itté en un plazo de 48 horas, en una nota en la que acusaba al Gobierno francés de «actos contrarios a los intereses de Níger».

Sin embargo, cumplido el plazo el pasado lunes el diplomático permanecía en el país africano. Ese día, el presidente francés, Emmanuel Macron, se reafirmó en el pulso con la junta militar nigerina y saludó el trabajo del embajador y los diplomáticos galos en Níger, que seguían, dijo, «en su puesto».

Francia era uno de los principales socios económicos y militares de Níger, pero después del golpe de Estado que depuso al presidente electo, Mohamed Bazoum, el país europeo se convirtió para la junta militar en un símbolo de la dominación occidental.

París tiene unos 1.500 soldados en Níger, el último país del Sahel junto a Chad en el que dispone de presencia militar, después de haber tenido que salir de Mali y Burkina Faso por los golpes de Estado que han llevado a sendas juntas militares a tomar las riendas del poder.