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El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, a su llegada a la reunión del Consejo Europeo de este jueves

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, a su llegada a la reunión del Consejo Europeo de este juevesAFP

Guerra de Ucrania

Viktor Orbán desafía a sus socios y defiende su reunión con Putin para buscar la paz en Ucrania

El primer ministro húngaro considera que el resto de sus socios no quieren el cese del conflicto a juzgar por sus decisiones

Viktor Orbán ha causado gran revuelo con sus declaraciones al llegar a la reunión del Consejo Europeo de este jueves.

El primer ministro húngaro se crece ante la prensa y sabe que sus declaraciones levantan ampollas entre el resto de socios cuando se refiere a temas delicados de manera clara y directa.

Ha dicho estar «orgulloso» de sus relaciones con el presidente ruso Vladirmir Putin para buscar la «paz» en Ucrania. Esto le ha servido para criticar la «estrategia» de sus socios de la Unión Europea a los que ha culpad de buscar la «guerra».

«Diferimos de la mayoría, de la estrategia en este tema. Vosotros tenéis una estrategia de guerra, nosotros tenemos una estrategia de paz y nos gustaría hacer todo para tener la paz», ha afirmado el mandatario magiar.

Hungría es uno de los países más críticos con el presidente Zelenski al considerar que la minoría húngara que vive al suroeste de Ucrania es maltratada de manera sistemática por Kiev.

La ley del presidente ucraniano que aprobó para imponer el ucraniano en detrimento de las lenguas regionales está presente en Budapest.

Los húngaros son pragmáticos en su política exterior, saben que son un pueblo pequeño y que no tienen la capacidad económica y política necesaria para imponer sus posturas. Eso no quita que no dejen de buscar nuevas vías para solucionar problemas propios y comunitarios.

«Sabemos que nuestras posturas son las que adopta la mayoría al paso de los años», dijo Orbán en una reunión con periodistas el año pasado en Budapest, «por eso no cambiamos nuestro parecer ante cuestiones fundamentales».

Esto se ha visto claro respecto a la guerra de Ucrania. El primer ministro húngaro ha defendido la necesidad de mantener abiertas «todas las líneas de comunicación con los rusos», porque «de lo contrario no habría oportunidad para la paz. Es una estrategia, estamos orgullosos de hacerlo», continuó, y se mostró partidario de un «alto el fuego» entre Ucrania y Rusia.

Buscas nuevas vías de financiación

Viktor Orbán afirmó que está esperando que una delegación ucraniana llegue a Budapest para negociar la retirada de las sanciones definitivas a la entidad rusa del banco húngaro OTP antes de levantar su veto al desembolso de 500 millones de euros del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz con el que la UE financia el envío de armas a Kiev.

La estrategia exterior húngara pasa por encontrar financiación en terceros países debido al bloqueo al que está sometido por Bruselas por motivos ideológicos. «Si nos cierran las puertas en Bruselas, debemos abrirlas en otros sitios», aseguran fuentes diplomáticas.

Muestra de esto es el reciente viaje a Pekín. China considera a Hungría un socio económico clave en su expansión económica e invierte en el país desde hace años.

El territorio que ocupa es un enclave fundamental. El país magiar construye una macro estación para trenes de Oriente de la Nueva ruta de la seda que abriría las puertas al resto del continente.

En plena guerra comercial con China, algunos ven con recelo los éxito diplomáticos de Budapest, según informan fuentes diplomáticas.

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