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El primer ministro húngaro Viktor Orban atiende a los periodistas momentos antes del Consejo EuropeoAFP

Seguridad

Viktor Orbán y su política de inmigración, «Nuestro método es no dejarlos entrar»

El primer ministro de Hungría es una de las figuras del continente que con más ahínco se opone a las políticas inmigratorias de Bruselas

Líderes europeos como Ursula von der Leyen, Olaf Scholz o Emmanuel Macron han llamado la atención recientemente sobre las consecuencias negativas de una inmigración que han promovido desde hace décadas a nivel nacional y comunitario.

Esta postura se ha tachado en los últimos años de racista, xenófoba y fascista. Quien no ha cambiado en su parecer ha sido el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, quien se ha postulado desde hace años como el adalid europeo contra la inmigración masiva.

Orbán gobierna desde hace más de diez años, pero su figura se ha convertido en la bestia negra para muchos a raíz de la gran crisis sufrida en Europa con la entrada de millones de inmigrantes ilegales a través de varios países, en muchas ocasiones asaltando fronteras violentamente.

Por defender a toda costa su territorio, Hungría se convirtió en el objetivo de todas las críticas de los líderes autodenominados progresistas. Con el tiempo, otros países se unieron: Polonia -Grupo de Visegrado- o la Italia de Georgia Meloni.

Otros partidos y líderes políticos han sostenido la misma postura, si bien nunca han gobernado. Viktor Orbán ha demostrado que puede haber progreso para un país sin comprar todo el paquete de medidas ideológico que pretende Bruselas.

El ejemplo cunde como la pólvora, y eso es lo que no quieren que se permita. De ahí, entre otras razones, la persecución que sufre Hungría y, en especial, su líder.

Cambio en Bruselas

El primer ministro dijo que se necesita un cambio en Bruselas porque los actuales líderes de la UE no son aptos para manejar la situación en Ucrania y la inmigración.

El mandatario húngaro se pronunció al respecto la semana pasada durante la última reunión del Consejo Europeo. «Nuestro método es no dejarlos entrar», declaró al ser preguntado sobre su solución para la inmigración.

Señaló la inmigración como una fuente de problemas. El actual planteamiento conduce “al crimen, al terrorismo, a tensiones políticas inmanejables con enormes costes, y señaló que todo esto ya lo advirtió en 2015. «Casi nos crucifican» en Bruselas en ese momento y la valla de Hungría fue calificada de «libelo de sangre», dijo.

No es algo que no hubiera dicho antes. Dos días antes de la reunión del Consejo apuntó que “aquellos que apoyan la inmigración también apoyan el terrorismo".

Balázs Hidvéghi, eurodiputado de Fidesz, dijo que mientras los inmigrantes ilegales «masacran a víctimas inocentes a diario» en Europa Occidental, la Unión Europea «insiste en impulsar su pacto migratorio» antes de las elecciones al Parlamento Europeo de 2024. Pacto al que se opusieron tanto Hungría como Polonia en la pasada cumbre de Granada.