El entorno de Netanyahu habla ya de elecciones en Israel cuando concluya la guerra en Gaza
El gobierno de Netanyahu, ya seriamente dañado por la polémica sobre la reforma judicial antes de la masacre de Hamás del 7 de octubre, se tambalea.
La guerra en Gaza para destruir al grupo terrorista Hamás, si bien ha permitido al primer ministro israelí contar con una tregua política con los partidos de la oposición, ha dado la puntilla al gobierno de coalición que sostiene a Netanyahu.
Las elecciones parecen inevitables, aunque Netanyahu, que ha demostrado que es un superviviente político, pretende sacar fortaleza de sus debilidades y convertir una hipotética victoria sobre Hamás en un motor que le permita permanecer en el gobierno.
El diario israelí Jerusalem Post señala que el entorno más cercano al primer ministro ya ha empezado a trabajar con la posibilidad de unas elecciones en cuanto se de por concluida la Operación Espadas de Hierro en Gaza.
En concreto, cita al antiguo responsable del Consejo de Seguridad Nacional, y persona muy cercana a Netanyahu, el general retirado Yaakov Amidror.
Amidror habría asegurado en declaraciones a la radio israelí 103FM que «sería apropiado celebrar elecciones» tras la guerra.
«Creo que, en cuanto se concluyan las investigaciones sobre los sucesos y errores cometidos antes del 7 de octubre, habría que celebrar elecciones y dejar que el pueblo decida una vez queden claras las responsabilidades de cada uno», declaró.
Por ejemplo, ante la generalizada oposición de la sociedad israelí a la reforma judicial, le pidió que la frenara.
También se ha mostrado muy crítico con algunos de los aliados de Netanyahu en el gobierno, que defienden abiertamente un desplazamiento de la población gazatí a Jordania o Egipto: «No podemos aceptar esas alucinaciones de que los palestinos se marcharán a vivir a Jordania, o que se convertirán en ciudadanos israelíes sin derechos. Eso no es admisible en un país democrático».