Inmigrantes a su llegada a la isla italiana de Lampedusa
Italia defiende su acuerdo con Albania ante la UE: «Respeta todas las normas»
La Comisión no ha visto similitudes entre este acuerdo y el que el Reino Unido estableció con Ruanda, que generó grandes polémicas
El acuerdo migratorio firmado entre Italia y Albania ha generado una ola de reacciones críticas a nivel europeo por su polémica decisión de procesar a inmigrantes ilegales desde el territorio albanés.
Pero Antonio Tajani, vicepresidente del Ejecutivo italiano y ministro de Asuntos Exteriores, ha salido en defensa del histórico pacto, asegurando que cumple con todas las normativas de la Unión Europea.
El acuerdo, que fue objeto de discusión en la reciente reunión de ministros de Exteriores del G7 en Tokio, establece la creación de dos centros de acogida en territorio albanés.
Estos centros, con una capacidad de hasta 3.000 personas, serán dedicados a la identificación y acogida de migrantes rescatados en el Mediterráneo. Se prevé que para la primavera de 2024, puedan recibir hasta 36.000 inmigrantes anualmente, gestionando tanto los procedimientos iniciales como las solicitudes de asilo y repatriación.
El gobierno de Giorgia Meloni, en un importante gesto de transparencia, informó previamente a Bruselas sobre el pacto, pese a que Albania no es miembro de la UE. Esta iniciativa, según Tajani, tiene como objetivo primordial la seguridad y garantizar la devolución de aquellos que no tienen derecho a entrar en Italia.
Por su parte, la Comisión Europea ha solicitado a Italia detalles adicionales sobre el convenio. Aunque Albania no es parte de la UE, la Comisión no ha visto similitudes preocupantes entre este acuerdo y el que el Reino Unido estableció con Ruanda, el cual fue objeto de controversia. Una portavoz comunitaria señaló que cualquier cooperación con países fuera de la UE debe respetar el derecho internacional de la ONU.
Sin embargo, no todas las voces son de aprobación. El Partido Demócrata (PD) y organizaciones como la sección italiana de Amnistía Internacional y ACNUR han expresado su preocupación. Mientras que el PD considera que el acuerdo podría representar una violación del derecho internacional y europeo, Amnistía Internacional lo ha tachado de ilegal y ACNUR ha recordado la importancia de respetar las leyes de protección a solicitantes de asilo y refugiados.
Pero Meloni ha defendido la legalidad y viabilidad del acuerdo con Albania, a pesar de que este país aún no es miembro de la UE ni participa en el espacio Schengen. La posición de Italia se mantiene firme en la convicción de que el acuerdo es una medida positiva y necesaria, en un contexto donde las llegadas de migrantes a las costas italianas han experimentado un notable incremento en comparación con los años anteriores y sobrepasado los sistemas.
