Fundado en 1910

Nicolás Maduro impulsa un referendo sobre la soberanía de la región del Esequibo actualmente controlado por GuyanaTwitter

Guyana señala que el referendo impulsado por Maduro sobre la soberanía del Esequibo es una «amenaza existencial»

La dictadura chavista quiere controlar los ricos recursos de la región o al menos crear un conflicto internacional para suspender las elecciones de 2024

Guyana afirmó este martes ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que el referendo que Venezuela prepara sobre la disputa territorial sobre la región del Esequibo que mantienen ambos países desde hace más de un siglo constituye una «amenaza existencial».

Los dos países están enfrentados por una región anglófona de 160.000 km2 conocida como el Esequibo o Guayana Esequiba, rica en minerales y petróleo. Actualmente, el área se encuentra bajo administración de Guyana.

La disputa existe desde antes de la independencia de Guyana en 1966, pero las tensiones aumentaron después de que las autoridades de Georgetown otorgaron el mes pasado licencias de explotación petrolera en la zona.

En respuesta, Venezuela anunció que celebrará un referendo el 3 de diciembre para consultar a sus ciudadanos si apoyan crear en la zona un nuevo estado llamado «Guayana Esequiba» y otorgar la nacionalidad venezolana a sus habitantes, lo que Georgetown denuncia como «expansionismo».

«No es exagerado calificar la amenaza actual como existencial para Guyana», declaró Carl Greenidge, un exministro guyanés que representa al país sudamericano ante la CIJ, con sede en La Haya. Consideró que esta es una situación de «urgencia».

Greenidge destacó ante el tribunal que existe riesgo de que Guyana pierda de forma «irreparable» y «potencialmente permanente» sus derechos.

Los representantes de Caracas tienen turno para presentar su alegato en La Haya el miércoles.

Sin embargo, tras culminar la audiencia, la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, señaló a la televisión estatal de su país que, durante su defensa, Guyana había «mentido y manipulado» al decir que consideraba «una amenaza» para su seguridad las marchas de fuerzas militares de Venezuela y las movilizaciones para «participar en el referendo».

«Guyana nunca deja de asombrarnos, estamos realmente muy asombrados porque no solamente son herederos de un territorio que le robó el Reino Unido a Venezuela sino que heredaron también esa estirpe de arrogancia imperialista y colonialista», dijo la dirigente chavista.

Desde Caracas, Nicolás Maduro reiteró que Venezuela decidirá sobre «la Guayana Esequiba de manera soberana».

«Ellos pretenden que la Corte Internacional de Justicia derogue la Constitución, de un golpe de Estado», dijo durante una reunión con su cuerpo diplomático al rechazar la solicitud de Guyana para frenar el referéndum.

Una riqueza en juego

La pugna fue atizada después de que el gobierno de Guyana anunciara en octubre un importante hallazgo de petróleo.

Guyana tiene reservas de crudo por cerca 10.000 millones de barriles, una cantidad que supera los depósitos que tienen países como Kuwait o Emiratos Árabes Unidos.

La consulta organizada por Caracas aborda la pregunta de si el pueblo venezolano debe rechazar el acuerdo de 1899 que defiende Guyana y que Venezuela sostiene que fue «impuesto fraudulentamente».

En la papeleta también se plantea si Venezuela debe seguir rechazando la jurisdicción de la CIJ para esta disputa.

Guyana sostiene que la votación allana una vía para que Venezuela se apodere «unilateral e ilegalmente» del territorio, lo que implica un «daño irreparable».

El gobierno de Georgetown quiere que el tribunal internacional frene el referendo «bajo su formato actual» y que Venezuela se abstenga de cualquier acción para apoderarse del Esequibo.

La CIJ resuelve disputas entre Estados y sus decisiones son vinculantes, pero no tienen ningún mecanismo para asegurar su cumplimiento.