El nuevo presidente de Argentina, Javier Milei
Milei se enfrentará a una aritmética parlamentaria de pesadilla para sacar adelante sus propuestas
El proyecto de «reconstruir Argentina» se encontrará con numerosos obstáculos en las cámaras del Congreso donde el partido de Milei está en minoría
Javier Milei es ya el nuevo presidente de Argentina con un proyecto, «la reconstrucción de Argentina», y un diagnóstico: «no hay plata».
Luis Caputo, el ministro de Economía de Milei, anunció que el martes presentará el plan económico del gobierno con medidas concretas.
Por el momento, sólo se han anunciado generalidades o intenciones: reducir el déficit fiscal, dolarizar la economía, adelgazar el Estado para contener la inflación –desbocada a un 140 %–, acabar con el intervencionismo estatal, privatizaciones, promover la iniciativa privada o desmantelar el Banco Central.
Lo cierto es que se espera un plan de choque radical para hacer de Argentina un país nuevo que salga de la miseria en la que el peronismo la ha hundido durante décadas.
Sin embargo, una cosa son los planes y las intenciones y otra muy distinta es las opciones reales de llevar a cabo su plan.
Milei ha logrado alcanzar la presidencia de Argentina, pero carece de mayoría en ambas cámaras del Congreso de Argentina, donde los peronistas siguen siendo los más representados.
El nuevo mandatario argentino debería negociar en una difícil aritmética parlamentaria con partidos muy alejados en muchos aspectos de las propuestas y estilo de Milei.
El partido de Milei, La Libertad Avanza, cuenta con 40 diputados de los 257 que conforma la Cámara, mientras que en Senado tiene 7 de los 72 Senadores.
Los peronistas de Unión Por la Patria cuentan con 102 diputados, más otros 5 de partidos izquierdistas, y son la primera fuerza de la Cámara, y 33 senadores.
En esa realidad, el partido de Milei podría tratar de buscar los apoyos a sus propuestas del partido de centro derecha Propuesta por el Cambio (Pro), de Patricia Bullrich y el expresidente Mauricio Macri, que cuenta con 41 diputados, así como del partido Unión Cívica Radical, que tiene 35.
Asimismo, podría tratar de buscar apoyos puntuales de los 6 diputados de la Coalición Cívica y de 26 diputados de diferentes partidos más pequeños.
Para poder aprobar sus reformas, incluso para poder debatirlas, Milei y su partido, La Libertad Avanza, deberán lograr el apoyo de al menos 129 diputados en la Cámara y 37 senadores.
El hecho de que ni el bloque peronista ni el bloque conservador cuenten con el quorum necesario para poder impulsar sus propuestas legislativas anuncian una legislatura compleja en la que Milei no lo tendrá nada fácil sacar adelante su plan para una nueva Argentina.