El Supremo de Israel tendría listo un fallo para tumbar la reforma judicial de Netanyahu
Los medios israelíes filtraron el borrador del fallo judicial en el que por una decisión dividida de ocho a favor y siete en contra se anularía la reforma judicial
La «Ley de razonabilidad» aprobada el verano pasado por la coalición de Gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu como parte de su programa de reforma judicial estaría a punto de ser tumbada por el Tribunal Supremo de Justicia, según filtraron medios israelíes.
En una decisión polarizada y potencialmente histórica, el panel de 15 jueces que conforman el alto tribunal estaría dividido en ocho a favor y siete en contra de anular la ley, informó el miércoles el canal 12 de noticias israelí, citando un documento filtrado que contiene la postura no definitiva de cada uno de los jueces.
La ley en cuestión prohíbe a todos los tribunales, incluido el Tribunal Superior de Justicia, deliberar o pronunciarse en contra de decisiones gubernamentales y ministeriales sobre la base del estándar judicial de «razonabilidad».
La filtración provocó reacciones inmediatas de los miembros de la coalición gobernante quienes criticaron la presunta decisión y la consideraron que «socavaba la unidad nacional» que se estaba demostrando durante la guerra en curso contra los terroristas de Hamás.
Por su parte, los opositores de Netanyahu que solicitaron la anulación de la ley afirmaron que la filtración era un intento de intimidar a los jueces y presionarlos para que cambiaran su fallo y finalmente no anularan la legislación.
Debate acalorado
Durante una larga audiencia el pasado septiembre, los peticionarios contra la ley de Netanyahu, así como el Fiscal General Gali Baharav-Miara, argumentaron que «eliminaba las barreras cruciales que protegían la democracia israelí», específicamente la independencia de algunos altos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, y aumentaba el poder del Gobierno a expensas del poder judicial hasta tal punto que «socavó a Israel como democracia».
Por el contrario, el Gobierno israelí y los defensores de la ley argumentaron que la norma corregía el «alcance demasiado amplio por parte de los tribunales para intervenir en decisiones políticas» y que le había permitido «sustituir la voluntad de la mayoría por su propia visión del mundo»
Los defensores de la norma argumentaron que el tribunal carece del poder para anular una «Ley Básica» [de rango constitucional] como lo es la Ley de razonabilidad. Hasta ahora, el alto tribunal nunca ha derogado una de estas leyes fundamentales, pero siempre ha alegado que tiene potestad para hacerlo.
Israel no cuenta con una Constitución, de manera tal que leyes básicas o fundamentales son la cúspide de su ordenamiento jurídico
La portavoz de la autoridad judicial emitió un comunicado el jueves denunciando la filtración y afirmando que la redacción de la sentencia aún no había concluido.
«Consideramos las filtraciones no autorizadas con gran severidad y no haremos comentarios al respecto. El fallo se publicará una vez finalizado [el proceso de] redacción del mismo», se lee en el comunicado recogido por The Times of Israel.