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Momento de la liberación de los prisioneros de guerra ucranianosAFP

Rusia libera 230 prisioneros de guerra ucranianos, incluidos los siete héroes de la isla de las Serpientes

El intercambio de prisioneros se ve como una victoria para las fuerzas de Kiev, pero demuestra también que Rusia usa a los capturados en combate como moneda de cambio

El regreso de 230 ucranianos en el primer canje de prisioneros de guerra desde agosto, incluidos 48 de los considerados desaparecidos en combate, trae buenas noticias al país en medio de intensos ataques con misiles y drones, aunque miles de personas más siguen cautivas en Rusia, incluidos civiles.

El 49º intercambio de prisioneros de la víspera entre Rusia y Ucrania se convirtió en el mayor desde el comienzo de la invasión rusa, en febrero de 2022.

También puso fin a una larga pausa en los intercambios que los representantes del Cuartel General de Coordinación para el Tratamiento de Prisioneros de Guerra de Ucrania atribuyeron previamente, en declaraciones a Efe, al deseo de Rusia de desestabilizar la sociedad ucraniana.

El regreso a Ucrania de 48 soldados cuyo destino se desconocía, pero que finalmente estaban en poder de Rusia, ha sido calificado ampliamente de milagro, y ha dado esperanzas a los familiares de más de 16.000 soldados ucranianos considerados desaparecidos en combate de que sus seres queridos podrían estar realmente vivos.

El intercambio también incluyó a miembros de la Guardia Nacional capturados durante la ocupación de la central nuclear de Chernóbil y a siete guardias fronterizas de la isla de las Serpientes que pasaron casi dos años en cautiverio ruso.

Varios soldados ucranianos capturados en la planta metalúrgica de Azovstal de Mariúpol (en la región oriental de Donetsk) en mayo de 2022 también fueron liberados en el canje, y que supuso, a su vez, el regreso a sus hogares de 248 soldados rusos.

Según Serguí Volinskí, comandante de la 36ª Brigada de Infantería de Marina, la médico de combate Halina Fedishin se convirtió, además, en la última mujer de su unidad en regresar a Ucrania.

Este jueves Fedishin se casó con Mikola Gritseniak, que también pasó una larga temporada en cautiverio ruso.

«Cada uno de ellos experimentó una situación que pocos pueden imaginarse. Sufrieron muchas pérdidas, pero no perdieron su espíritu», afirmó Volinskí.

El regreso de los soldados ucranianos no es sólo un acontecimiento alegre, sino también «un símbolo de la invencibilidad» de la nación, subrayó.

La espera de soldados de Azov continúa

El regreso de estos 230 prisioneros puso fin a la angustiosa espera de sus familias, que apenas tenían información sobre el paradero y las condiciones de sus seres queridos, ya que Rusia los mantenía casi completamente aislados.

Sin embargo, para miles de personas que no encontraron un rostro familiar en el vídeo difundido desde el lugar del intercambio ni en las listas de los cautivos devueltos, la espera continúa.

Esto incluye a unas 900 familias de soldados del batallón de Azov, muchos de los cuales defendieron Azovstal y Mariúpol del asedio ruso en la primavera de 2022.

Más de la mitad de ellos resultaron heridos, y son los más duramente tratados por Rusia, que considera al regimiento adscrito a la Guardia Nacional de Ucrania una organización terrorista, escribió Denís Prokopenko, comandante de Azov. Están «olvidados y siguen en manos del enemigo», declaró.

La preocupación por su destino es alta. Más del 94 % de los ucranianos liberados afirman que sufrieron torturas, según declaró anteriormente a Efe Petró Yatsenko, del Cuartel General de Coordinación para el Tratamiento de los Prisioneros de Guerra.

«Recibían palizas todos los días, eran torturados con privación de alimentos y perdían mucho peso, no recibían atención médica y no podían relacionarse con sus familiares», subrayó Yatsenko. Todos necesitaron una larga rehabilitación, dijo.

Miles de civiles cautivos

Sólo seis civiles fueron incluidos en el último canje del miércoles. A principios de diciembre, al menos 28.000 más permanecían en manos rusas, según el comisario de Derechos Humanos del Parlamento ucraniano, Dmitró Lubinets, lo que refleja la represión continua en los territorios ocupados.

Cientos de ellos fueron secuestrados en las regiones de Kiev, Cherníguiv y Sumi durante su ocupación parcial de 2022, según declaró la directora ejecutiva de la Iniciativa de Medios de Comunicación para los Derechos Humanos, Tetiana Katrichenko, en una reciente reunión informativa.

En las dos últimas semanas se han producido «algunos avances», que han permitido intercambiar ropa de abrigo para los cautivos, declaró Lubinets a la radiotelevisión pública ucraniana, Suspline.

Reveló que era posible otro intercambio en las próximas semanas, pero advirtió de que Rusia podía detener el proceso en cualquier momento.