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Militantes y partidarios de Hezbolá en la ciudad de Nabatieyh, en el sur del LíbanoAFP

Así es Radwan, la unidad de élite de Hezbolá que Israel es incapaz de neutralizar

Desde el pasado mes de octubre, las Fuerzas de Defensa de Israel han matado a alrededor de 50 milicianos de esta unidad, entre ellos el alto comandante Wissam al Tawil

La violencia en la frontera norte de Israel ha vuelto a alcanzar un nuevo pico estas últimas semanas, cuando la milicia chií libanesa Hezbolá mató, el pasado miércoles, a una soldado israelí por el impacto de un cohete contra una base militar hebrea. Israel identificó a la militar como Omer Sarah Benjo, de tan solo 20 años. El puesto militar se encontraba en Safed, una ciudad a unos 14 kilómetros de la frontera con el Líbano, alejado de los principales puntos de fricción, que se concentra alrededor de la denominada Línea Azul o línea de demarcación.

Pero Safed no fue la única ubicación donde llegaron los cohetes de Hezbolá, sino que también alcanzaron las aldeas de Netua y Matara, hiriendo a otras ocho personas. Israel respondió de inmediato bombardeando el sur del Líbano, matando a nueves personas. cuatro de ellas eran miembros de una misma familia, según informó la Agencia Nacional de Noticias (ANN). El ataque israelí también alcanzó a un comandante libanés en el sur de la milicia chíi libanesa.

El Ejército israelí aseguró que sus fuerzas atacaron posiciones de Hezbolá en las áreas de Jabal el Braij, Houneh, Dunin, Adchit y Souaneh, entre ellas «bases militares, operaciones de control» y otras infraestructuras. Entre estos objetivos también estaban las instalaciones de la fuerza de élite Radwan. Un cuerpo específico de la milicia proiraní que opera, principalmente, en la frontera con Israel. Ayer, Israel volvió a lanzar una gran ofensiva sobre el sur del Líbano y a unos 60 kilómetros al norte de la frontera con Israel. Unos ataques cuyo objetivo, asegura el país hebreo, era dos instalaciones de almacenamiento de armas de Hezbolá cercanas a la ciudad de Sidón.

El Estado judío siempre creyó que su principal Hezbolá, y la unidad de élite Radwan, era la única amenaza real para la seguridad de su país. Un ataque como el perpetrado el pasado 7 de octubre por Hamás se podía atribuir a la milicia chií libanesa, pero la sorpresa vino cuando se produjo en la frontera sur con la Franja de Gaza. Israel calcula que la unidad cuenta con, aproximadamente miles de agentes, y que su principal objetivo es «conquistar la Galilea israelí». «Desplegada a lo largo de la Línea Azul entre Israel y Líbano, la unidad Radwan vigila de cerca el norte de Israel y siempre está recopilando información», han asegurado recientemente las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).

La unidad se creó en 2006 bajo el nombre de Fuerza de Intervención Rápida, pero fue rebautizada tan solo dos años después, en 2008, en honor del alto dirigente de Hezbolá Imad Mughniyah, asesinado ese año en una operación conjunta del Mosad –Agencia de Inteligencia israelí– y la CIA. Mughniya respondía al apodo de «Radwan», que en el islam se identifica con el ángel que protege las puertas del cielo. Su experiencia en batalla es extensa. Sus combatientes se curtieron luchando del lado del dictador sirio Bashar al-Ásad, durante la guerra civil que asoló al país árabe.

Hezbolá siempre ha sido la gran amenaza para la existencia de Israel y el principal caballo de batalla de Irán, quien financia generosamente a la milicia chií libanesa. Desde el pasado 7 de octubre, tras la masacre perpetrada por Hamás, y la inmediata intervención de la milicia proiraní en el conflicto, el país hebreo ha redoblado su ofensiva contra la unidad de élite Rawdan. Las FDI identificaron a su líder como Haytham Ali Tabatabai. El Departamento de Estado de Estados Unidos reveló que Tabatabai «comandó las fuerzas especiales del grupo en Siria y Yemen» y trabaja como «parte de un esfuerzo mayor de Hezbolá para proporcionar entrenamiento, material y personal en apoyo de sus actividades regionales desestabilizadoras».

Desde el pasado mes de octubre, las Fuerzas de Defensa de Israel han matado a alrededor de 50 milicianos de esta unidad, entre ellos el alto comandante Wissam al Tawil. Al Tawil, según declaró un funcionario de Hezbolá a la agencia Associated Press, fue uno de los que inició la guerra contra Israel en 2006 y luchó en la guerra civil siria, donde estaba a cargo de coordinar entre el grupo libanés y el ejército sirio en las batallas contra el grupo Estado Islámico.