Los terroristas de Hamás aseguran que han muerto 30.000 palestinos por la guerra con Israel en Gaza
Israel señala que desde el inicio de la guerra ha eliminado a 9.000 terroristas palestinos
Hamás toma ventaja frente a Israel en la guerra de cifras. Según el autodenominado «ministerio de Sanidad» de la franja de Gaza, gestionado por el grupo terrorista, la operación militar israelí ha causado hasta la fecha 29.954 muertos, además de 70.325 heridos.
Aunque son cifras sin verificar procedentes de un grupo terrorista que ha hecho del asesinato, la tortura y la mentira su seña de identidad, medios de comunicación de todo el mundo, organizaciones humanitarias y gobiernos han dado por buenos los datos proporcionados por Hamás.
La misma ONU, a través de su cuestionada Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA) –cuyos vínculos con Hamás de algunos de sus miembros están probados y reconocidos– emplea la cifra ofrecida por Hamás sin cuestionarla.
Lo cierto es que no hay más fuentes que proporcionen datos fiables de bajas civiles en Gaza desde que comenzó la guerra.
El Ejército israelí únicamente difunde las bajas causadas entre los terroristas de Hamás y de otras organizaciones activas en Gaza, como Yihad Islámica.
El gobierno de Israel aseguró que durante la incursión terrorista de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023 murieron 1.200 personas.
En cuanto a terroristas eliminados, el Ejército israelí afirma haber eliminado a 9.000 terroristas en le franja de Gaza desde el inicio de la guerra.
Mientras tanto, continúan las operaciones militares israelíes en Gaza. Las Fuerzas de Defensa de Israel ultiman el asalto al enclave sur de Rafah, en la frontera con Egipto, donde según la inteligencia israelí se han atrincherado cuatro batallones de Hamás y donde se mantienen a varios rehenes.
Al mismo tiempo, Estados Unidos, Qatar, Egipto, Jordania y Arabia Saudí aceleran en las negociaciones para forzar un alto el fuego antes del Ramadán. La apuesta es lograr que Israel y Hamás pacten un cese de hostilidades durante 40 días para lograr un intercambio de 40 rehenes por 400 palestinos encarcelados en Israel.