Irán invade a Occidente por la retaguardia
Estamos a tiempo para lograr que en menos de 20 años, lo que representa la República Islámica, no haya destruido nuestros valores, nuestras libertades y nuestras creencias
Mientras Occidente se encuentra autodemoliéndose en un debate alrededor de los temas woke, desfigurando su identidad y sus valores; otras naciones se encuentran, sistemáticamente, haciendo crecer su poder por distintos rincones del mundo: su único propósito es dinamitar la democracia, la libertad, los derechos humanos.
Un caso del cual venimos encendiendo alarmas desde hace años, es el de Irán, más allá de la guerra actual en Oriente medio, presten atención a lo que también hace Irán en la retaguardia. Tanto en Iberoamérica, como en África, la República Islámica ha extendido sus tentáculos de diversas maneras. Por ejemplo, hace más de 20 años en Venezuela, la cooperación se inició con una simple fábrica de bicicletas.
Esa famosa fábrica, que no sabemos si produjo alguna bicicleta, fue un enorme motivo de burla. Sin embargo, hoy en día, los iraníes están involucrados en reparar aviones militares, desarrollan un plan de drones militares, operan nuestras refinerías de petróleo, asesoran en temas agrícolas y entrenan a las Fuerzas Armadas venezolanas en como lidiar con ciberataques. Esta lista muestra las cosas que medianamente se conocen públicamente. Imaginen ustedes lo que se macera de modo subterráneo.
Maduro ha convertido a Venezuela en el cuartel general de una operación geopolítica que sigue creciendo
El hecho es que, en el caso de Iberoamérica, Nicolás Maduro ha convertido a Venezuela en el cuartel general de una operación geopolítica que sigue creciendo. Hace pocos meses, Bolivia e Irán encabezaron la construcción de una escuela de formación de milicianos, para formar ejércitos revolucionarios de los países de la llamada Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA). En la alianza también aparece el régimen de Maduro como financista. Bolivia e Irán firmaron un acuerdo de cooperación militar en el 2022 y desde entonces el ministro de Defensa de Irán ha visitado la región en múltiples ocasiones. Paralelamente, se ha abierto un canal de televisión de contenidos iraníes en Bolivia y ahora Irán asesora a este país en materia de narcotráfico.
Además del caso boliviano, recientemente, la ministra de Interior de Argentina dio a entender que Hezbolá «tiene células» en la región de Iquique (Chile) y que «se descubrieron el año pasado, pero dos se escaparon a São Paulo». Igualmente, en Argentina, capturaron en enero de este año a un ciudadano sirio con pasaporte venezolano, que presuntamente organizaba un atentado.
Recordemos también que en Argentina 2022, un avión venezolano-iraní fue detenido por levantar alertas internacionales sobre sus tripulantes y su carga. Tras una investigación y las requisas respectivas, la Justicia argentina llegó a la conclusión de que uno de los pilotos de la aeronave había pertenecido a las llamadas Fuerzas Quds, una división de la Guardia Revolucionaria Islámica especializada en operaciones de inteligencia militar.
El avión fue decomisado por la Justicia de Argentina y posteriormente entregado a Estados Unidos para seguir con la investigación. Argentina ya ha sufrido en el pasado atentados terroristas como los de la AMIA o el de la embajada de Israel en Argentina, donde hubo cientos de víctimas y se demostró que Hezbolá fue quien planificó, organizó y financió la operación.
Alarmas similares se han encendido en Colombia. Según el semanario francés Le Point, el grupo extremista musulmán podría estar operando en la capital colombiana desde un centro religioso, la denuncia la hizo el exministro Juan Camilo Restrepo.
Pero este proceso perverso también se está dando en África. Irán vendió drones de uso militar al Gobierno de Etiopía en 2021, promoviendo la guerra en la región. También ha abastecido de municiones a los Ejércitos de Kenia y Costa de Marfil, entre otros. Igualmente, existe la sospecha de que una buena parte del armamento utilizado por los grupos yihadistas del continente están financiados por Irán.
El año pasado, el presidente de Irán hizo una gira por África y firmó varios convenios económicos y de seguridad con países como Egipto y Kenia. Analistas consideran que Irán puede sacar provecho de la rivalidad y la competencia de las grandes potencias por el control y el acceso a los recursos y los mercados económicos en África. Su intención es desempeñar un papel complementario a los grupos radicales que ha financiado en algunos países africanos. Igualmente, busca establecer alianzas económicas que le faciliten el camino para incrementar su presencia e influencia política y social.
Lo más increíble, es que este sofisticado plan está siendo desarrollado por un país arruinado que tiene una de las inflaciones más grandes del mundo. Un país cuyo PIB per cápita es de 4.600 dólares versus un promedio mundial de 12.700 dólares. Para que tengamos una estimación: la economía española, en términos de PIB es 13 veces más grande que la economía de Irán.
Recordemos la fábrica de bicicletas. Al principio fue un chiste, una burla. Estamos a tiempo para lograr que en menos de 20 años, lo que representa Irán, no haya destruido nuestros valores, nuestras libertades y nuestras creencias.