Israel rechaza la propuesta de alto el fuego y mantiene su operación en Rafah
El ejército mantiene lo que denomina una «operación limitada», de ahí la «evacuación» de distritos al este de Rafah
Gaza está en vilo. Este lunes, el Gabinete de Guerra decidió por unanimidad que Israel continuará su operación en Rafah, con el fin de ejercer presión militar sobre Hamás para avanzar en la liberación de nuestros rehenes y lograr los demás objetivos de la guerra.
Si bien la propuesta de Hamás está lejos de satisfacer las demandas fundamentales de Israel, Israel enviará una delegación de alto rango a Egipto en un esfuerzo por maximizar la posibilidad de llegar a un acuerdo en términos aceptables para Israel. Justo cuando Hamás anunció que aceptó una propuesta de alto al fuego de Egipto y Qatar.
La propuesta que avaló el grupo islamista
Jalil al Hayya, el principal negociador de Hamás, confirmó a Al Jazeera que el acuerdo constaba de tres fases, cada una de 42 días de duración. En la primera fase se contemplaba la liberación de 50 presos palestinos por cada mujer rehén liberada, el retorno de desplazados internos y un aumento en la entrada de ayuda y combustible. La liberación de hombres estaba prevista para la segunda fase.
Al Hayya afirmó que el presidente estadounidense, Joe Biden, se había comprometido a garantizar la implementación del acuerdo. También agregó que en la segunda fase se acordaría un alto el fuego permanente y la retirada total de las tropas israelíes, un punto al que Israel siempre se había negado.
Sin embargo, el ejército israelí sigue llevando a cabo lo que denomina una «operación limitada». Esto se ha traducido en la «evacuación» de distritos al este de Rafah, lo que ha provocado el traslado forzoso de alrededor de 100.000 palestinos, la mayoría de los cuales ya habían sido desplazados varias veces debido a los ataques israelíes. Esta amenaza se ha comunicado a los civiles a través de mensajes de texto en árabe, llamadas telefónicas y panfletos lanzados desde el aire.
Conversación entre Ministros
A pesar de la retórica de Netanyahu, quien advierte que «si es necesario, Israel actuará solo para defenderse», el respaldo militar y diplomático de Estados Unidos es crucial. No es coincidencia que el ministro de Defensa, Yoav Gallant, haya conversado con Austin para informarle sobre el inicio de la evacuación en una parte de Rafah.
La oficina de Gallant en Tel Aviv detalló que «se refirió a los esfuerzos realizados para lograr la liberación de los rehenes, indicó que en este momento Hamas rechaza los marcos disponibles (acuerdo) y destacó la necesidad de una acción militar, también en la zona de Rafah, ante la ausencia de una alternativa».
Austin respondió que «cualquier operación militar en Rafah requeriría un plan fiable para la evacuación de los ciudadanos palestinos y el mantenimiento de la ayuda humanitaria».
Según fuentes egipcias, la delegación de Hamás que estuvo en El Cairo este fin de semana y luego se trasladó a Doha para continuar las negociaciones.
El grupo, que acusa a Netanyahu de «sabotear los intentos de una tregua duradera que ponga fin a la agresión», advirtió que detendría las negociaciones en caso de una operación militar en Rafah.