Israel vuelve a bombardear un campo de refugiados en Rafah y causa otra masacre
El ataque israelí mató a una familia entera formada por siete personas que se encontraban en su tienda de campaña
Ni la orden de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de que Israel detenga su ofensiva sobre Gaza, ni el reconocimiento de este martes del Estado palestino por parte de España, Irlanda y Noruega han frenado a Israel en su avance en la ciudad sureña de Rafah.
Las fuerzas israelíes han vuelto a bombardear este martes un campo de refugiados en Rafah y han causado al menos siete muertos, después de haber matado el lunes a al menos 45 personas en otro campo en la misma zona.
El lugar golpeado hoy es un campo de desplazados gazatíes procedentes del norte de la franja situado en el barrio de Tal al Sultán, informó Europa Press.
Tal al Sultán se encuentra en la misma área que el campo de Barakasat, donde ayer Israel causó –según las Fuerzas de Defensa de Israel por error– una masacre de civiles.
Según Europa Press, los siete fallecidos de hoy forman parte de una misma familia y murieron al sufrir el impacto directo de un proyectil cuando se encontraban en el interior de su tienda de campaña.
Las Fuerzas de Defensa de Israel argumentaron que el ataque en Barakasat estaba dirigido contra dos altos cargos de Hamás e, inicialmente, reconoció solo algunos civiles heridos como resultado de un incendio desatado posteriormente.
«En Rafah evacuamos a un millón de residentes que no están implicados y, a pesar de nuestros esfuerzos, ayer (domingo) se produjo un trágico accidente», fue la declaración de Netanyahu el lunes.
El primer ministro también ordenó una investigación del suceso, calificado como «muy grave» por parte del principal fiscal militar de Israel, Yifat Tomer Yerushalmi.
El portavoz del gobierno israelí, Avi Hyman, aseguró que los terroristas buscados «se escondían en el sótano» de un edificio situado en el campo de refugiados.