El G7 respalda el plan de Biden para un alto el fuego en Gaza y eleva la presión para que Hamás lo acepte
El grupo que reúne a Alemania, Francia, Italia, Reino Unido, Japón, Canadá y EE.UU. instaron «a los países con influencia sobre Hamás» a cerrar un acuerdo
El G7 mostró este lunes su pleno respaldo al plan propuesto por el presidente de EE.UU., Joe Biden, para un pacto de alto el fuego entre Israel y el grupo terrorista Hamás en Gaza.
«Nosotros, los líderes del Grupo de los Siete (G7), respaldamos plenamente y respaldaremos el plan integral esbozado por el presidente Biden que conduciría a un alto el fuego inmediato en Gaza, la liberación de todos los rehenes y un aumento significativo de la asistencia humanitaria» a la franja palestina, declararon en un comunicado conjunto difundido por Italia, en la presidencia de turno del grupo.
A su vez, llamaron al movimiento islamista Hamás «a aceptar este acuerdo, con el que Israel está dispuesto a seguir adelante», e instaron «a los países con influencia sobre Hamás para garantizar que así sea».
También pidieron que la ayuda humanitaria pueda tener acceso «para su distribución en toda la Franja», apelaron a «un fin duradero de la crisis» y a que tanto «los intereses de seguridad de Israel» como de «seguridad civil de Gaza» puedan estar «garantizados».
Biden hizo el pasado viernes una propuesta de tregua consensuada con Israel en la que, en tres fases, Hamás y el Estado judío alcanzarían un alto el fuego con vías a la permanencia y la liberación de los cautivos israelíes que siguen en manos de las milicias palestinas dentro del enclave.
Según el presidente estadounidense, Israel habría propuesto a Hamás una primera propuesta de cese el fuego de seis semanas en que las tropas israelíes se retirarían de las áreas pobladas de Gaza y varios presos palestinos serían excarcelados a cambio de la liberación de las mujeres, ancianos y heridos cautivos.
La segunda etapa consistiría en el final permanente de las hostilidades y la liberación del resto de rehenes, mientras que la tercera y última fase se centraría en la reconstrucción de Gaza, ampliamente devastada por los casi ocho meses de ofensiva militar israelí.
La propuesta ha despertado el rechazo de los socios de coalición del Gobierno israelí de Benjamin Netanyahu, mientras que el escepticismo también impera entre la población gazatí.
El conflicto en Gaza ha marcado la actualidad mundial desde su estallido, y se espera que sea una de las cuestiones a tratar en la próxima reunión de este junio en el sur de Italia del G7, las siete democracias industrializadas más ricas del mundo.