Takahiro Nakamae, embajador de Japón en España
Conferencia del embajador de Japón en la Fundación Ortega-Marañón
Takahiro Nakamae: «Hay más conciencia en Japón que si pasa algo en Taiwán no nos podemos quedar sin hacer nada»
El diplomático nipón disertó sobre la política exterior y los desafíos de seguridad de Japón en el actual contexto de la alianza entre Rusia y China
En una exposición muy didáctica y en la que aclaró que sus declaraciones serían personales y no en representación del Gobierno de Japón, el embajador Takahiro Nakamae fue especialmente claro sobre los desafíos de seguridad de su país en el actual contexto de la alianza entre Rusia y China.
El diplomático japonés, con un castellano bastante fluido, explicó en la sede de la Fundación Ortega-Marañón que «la era posterior de la guerra fría está marcando su fin con nuevos desafíos globales» y recordó que la guerra de invasión de Rusia a Ucrania «no es una guerra regional sino que tiene una implicancia global».
«Rusia está pisoteando los principios del derecho internacional y ha sacudido los cimientos del orden internacional» de Naciones Unidas e incluso «amenaza con usar armas nucleares [cuestión que no sucede] desde su último uso hace 79 años» apuntó Nakamae.
Takahiro Nakamae, embajador de Japón en España, en la Fundación Ortega Marañón
El embajador nipón, que previo a desembarcar en Madrid en 2022, estaba al frente de la delegación diplomática en Buenos Aires, señaló que «los países emergentes, entre ellos China, está provocando un cambio en las relaciones de poder y algunos están desarrollando sus fuerzas militares con rapidez y poca transparencia».
Nakamae detalló que «un mundo de interrelación entre confrontación, competencia y cooperación definirá las relaciones internacionales» y que «el orden marítimo es cada vez más importante».
Japón depende en un 90 % de la importación de petróleo de medio oriente
En este sentido, el experimentado diplomático recordó que «en el mar de China Meridional hay un tema pendiente por definir de acuerdo con el derecho internacional, pero China piensa diferente y ha puesto 9 líneas discontinuas en la que todo lo queda dentro de ellas les pertenece y ya ha construido sobre islotes artificiales varias fortificaciones».
Nakamae es categórico en señalar que «para Japón se trata de la violación del derecho internacional y está en juego nuestra seguridad económica».
Por otro lado, explica que este expansionismo de China responde al establecimiento de dos líneas de defensa anti-acceso y el establecimiento de un área de denegación de enemigos. Esas líneas están precisamente sobre Japón, Taiwán e incluso llegan hasta Guam, una isla estadounidense con importante presencia militar.
El embajador nipón agregó que «China reclama la soberanía sobre las islas Senkaku que pertenecen a Japón y están muy cerca de Taiwán» al tiempo que explicó con un gráfico «la intrusión de la armada y pesqueros de China en las aguas territoriales de Japón» y cómo ha aumentado exponencialmente desde 2012.
Un Indo-pacífico libre y abierto
Nakamae detalló que Japón ha adoptado una nueva política de defensa que se adhiere a la doctrina de una Indo-pacífico libre y abierto y definió con claridad que «China representaba un desafío sin precedentes».
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En ese sentido el diplomático explicó que «la estabilidad y la libre navegación en el estrecho de Taiwán es de interés crítico para Japón» recordando que la isla depende en un 90 % de la importación de petróleo de medio oriente por lo que «cada vez hay más conciencia en la opinión pública de Japón que si pasa algo en Taiwán no nos podemos quedar sin hacer nada».
Taiwán es nuestro amigo y nos ayudamos mutuamente y hay mucha simpatía entre los dos pueblosEmbajador de Japón en España
«No tememos un mecanismo semejante a la OTAN sino acuerdos bilaterales de Defensa y esquemas de diálogo cuadriteral como el Quad entre Estados Unidos, Japón, Australia e India» admitió el embajador.
Sin embargo, Nakamae recordó los estrechos lazos comerciales entre ambos países -China es el principal socio comercial de Japón- y admite que «no es posible un desacoplamiento económico con China». Considera que «el escalamiento del conflicto no es de interés de ninguna de las partes, por lo que queda seguir dialogando e instando a que Pekín actúe acorde a sus responsabilidades internacionales».
«Japón quiere seguir siendo un país pacífico y nuestra política exterior es apegarse a las medios pacíficos. No nos apoyamos en la guerra para lograr nuestros objetivos» por lo tanto «nuestro armamento se limita a la defensa» concluyó el diplomático.
