El puente Francis Scott Key, en Baltimore, Maryland
Despejan el acceso al puerto de Baltimore más de dos meses después del derrumbe
La reapertura del canal es un paso significativo para la economía local y nacional, dado que el puerto de Baltimore es un punto crucial para el comercio en la región
El canal de acceso al puerto de Baltimore ha sido completamente despejado más de dos meses después del colapso del puente Francis Scott Key, que fue embestido por un carguero, anunciaron este lunes las autoridades locales.
«Hemos despejado el canal federal de Fort McHenry para un tránsito seguro», explicó la coronel Estee Pinchasin, comandante del distrito de Baltimore, en un comunicado. Según el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos, el canal de navegación, de 213 metros de ancho y 15 metros de profundidad, ya está operativo, permitiendo así la reanudación del tránsito marítimo comercial que había sido interrumpido por el accidente.
Para lograr esto, las autoridades tuvieron que retirar aproximadamente 50,000 toneladas de escombros que cayeron al río Patapsco, bloqueando el acceso a uno de los puertos comerciales más importantes de la costa atlántica de Estados Unidos. «El volumen de escombros removido fue significativo, pero era necesario para asegurar la navegabilidad y seguridad del canal», señaló Pinchasin.
El puente Francis Scott Key colapsó en la madrugada del 26 de marzo cuando el buque portacontenedores Dali perdió el control después de salir del puerto de Baltimore y lo embistió. A pesar de que la policía cortó el tráfico del puente tras recibir la alerta, seis trabajadores de la construcción, todos ellos latinoamericanos, que estaban reparando baches en el puente, fallecieron en el derrumbe.
Las labores de remoción de escombros comenzaron el 30 de marzo. Posteriormente, el 13 de mayo, se llevó a cabo una demolición controlada de una parte de la estructura del puente para facilitar la limpieza. El 20 de mayo, el carguero Dali, que había permanecido encallado desde el accidente, fue finalmente remolcado. Este operativo fue crucial para restablecer el acceso y asegurar la ruta marítima.
Un informe de la Junta de Seguridad de Transporte Nacional (NTSB) reveló que el día previo al accidente, el Dali, con bandera de Singapur, perdió energía eléctrica en dos ocasiones mientras estaba atracado en el puerto. Esta pérdida de energía podría haber contribuido a la incapacidad del barco para maniobrar correctamente, resultando en la colisión con el puente.
La reapertura del canal es un paso significativo para la economía local y nacional, dado que el puerto de Baltimore es un punto crucial para el comercio en la región. «La restauración del canal de navegación no solo restablece las operaciones portuarias normales, sino que también simboliza la resiliencia y la capacidad de recuperación ante desastres», concluyó Pinchasin.