Sin dirigirse la palabra y alejados en la foto de familia: así fue el reencuentro entre Sánchez y Milei
Que las relaciones diplomáticas entre España y Argentina están prácticamente rotas desde hace semanas no es ningún misterio. Una realidad que se hizo más patente que nunca en las últimas horas. El presidente español, Pedro Sánchez, y el mandatario argentino, Javier Milei, coincidieron este sábado en la cumbre internacional sobre Ucrania que tuvo lugar en Suiza, una cita a la que asistieron casi un centenar de líderes mundiales.
El posible reencuentro entre ambos tras el cruce de declaraciones generados en el marco del caso Begoña era realmente esperado. Los dos presidentes llegaron al complejo hotelero de Bürgenstock –situado a poco más de una hora de la capital, Berna– con unos cinco minutos de diferencia, siendo Milei el primero de los dos en llegar.
Ambos saludaron al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que recibió a cada uno de los mandatarios asistentes junto a la presidenta de Suiza y anfitriona de la cumbre, Viola Amherd.
Cuando llego el momento de sentarse en el plenario, los dos presidentes estuvieron en posiciones totalmente alejadas. Esto, lejos de ser una anécdota sin importancia, se intensificó en la correspondiente foto de familia. Tal como se puede ver, Sánchez se colocó en la esquina derecha, mientras que el mandatario argentino se encontraba en la parte más alejada, en la izquierda.
Finalmente, las cámaras no captaron ningún tipo de saludo o contacto entre ambos líderes, confirmado posteriormente por fuentes de la delegación española. De igual manera, estas dejaron claro antes del encuentro que Sánchez actuaría con Milei «con la educación y la formalidad habituales en una cumbre de esta envergadura».
Las dos realidades de Zelenski: cercano con Milei, protocolario con Sánchez
Lo que también se pudo ver durante la ronda de saludos es la gran calidez que hubo entre los presidentes de Argentina y Ucrania. Más allá de ese saludo, ambos dirigentes mantuvieron en las últimas horas un encuentro adicional, en los márgenes de la Cumbre para la Paz. Zelenski entregó a su homólogo argentino la Orden de la Libertad para méritos especiales de quienes refuerzan la soberanía e independencia del país europeo.
Este comportamiento dista mucho de la relación del presidente ucraniano con un Sánchez, que buscó de manera desesperada el abrazo ante Zelenski.
Crisis diplomática
Tenemos que retroceder al 21 de mayo de este mismo año, cuando España retiró a su embajadora en Buenos Aires. Esta decisión llegaba tras las declaraciones de Milei en las que calificó a Sánchez de «atornillado al poder» y acusó de «corrupta» a su esposa, Begoña Gómez.
El Gobierno español, a través del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, exigió una disculpa pública que Milei lógicamente no ofreció, lo que llevó a la retirada de la embajadora. Una decisión unilateral que llegaba por parte del gobierno español tras meses de continuo descrédito del Ejecutivo de Sánchez al presidente argentino.