Crimen organizado y política: cuando las mafias se extienden por Europa y las Américas
Europol sitúa a España como base de operaciones de organizaciones criminales y mafias europeas, asiáticas e hispanoamericanas
Cuando vemos en las noticias los problemas que está ocasionando el crimen organizado en un país como Suecia, claramente se justifica prender todas las alarmas.
En los últimos años, se han producido cerca de 150 muertes violentas por tiroteos entre bandas rivales en ciudades como Estocolmo, Gotemburgo y Malmö. Las bandas también han utilizado explosivos para atacar a sus rivales generando miedo en la población. Poblaciones jóvenes de inmigrantes unido a la escasez de oportunidades han llevado a la multiplicación del tráfico internacional de drogas y de armas del país nórdico.
Distintas mafias de 33 países usan a España como base de operaciones
Pasemos a España: hace pocas horas se ha dado a conocer un informe de Europol de más de 60 páginas, según el cual, distintas mafias de 33 países usan a España como base de operaciones. En el apartado de cohesión regional, Europol sitúa a España como base de operaciones de organizaciones criminales y mafias europeas, asiáticas e hispanoamericanas.
Pero el problema se agrava cuando el crimen organizado pasa de ser un cuerpo extraño en la sociedad y se transforma en un cáncer que termina por infiltrarse en los tuétanos de un país: su sistema financiero, sus partidos políticos, sus medios de comunicación y su elite social.
Ese es el peligro mayor que uno puede observar cuando capitales producto del ecosistema de corrupción Maduro o sus grupos vinculados, como el Tren de Aragua, empiezan a anidar de distintas formas en España a través de las colaboraciones de dinero a movimientos políticos, el blanqueo de capitales comprando inmuebles y negocios o la actuación directa en trafico de drogas y personas.
Infiltrarse en las instituciones
Si repasamos los casos más sonados de Venezuela, se trata de infiltraciones en los tuétanos de la institucionalidad española, pública y privada. Podemos hablar de decenas de ejemplos, pero recordemos los mas notorios:
Caso PDVSA: La Audiencia Nacional investiga desde 2018 una presunta trama de blanqueo de capitales procedentes de la petrolera estatal venezolana PDVSA. Se sospecha que exdirectivos y empresarios venezolanos utilizaron sociedades instrumentales y paraísos fiscales para desviar fondos y adquirir bienes en España, como inmuebles de lujo.
Caso Podemos: En 2014, se publicó un informe del Banco de España en el que se mencionaba que el partido político Podemos habría recibido financiación de Venezuela. Según este informe, el dinero provenía del Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPS), una fundación cercana a Podemos que habría recibido fondos del gobierno venezolano para realizar asesorías y estudios políticos.
Caso Morodo: El ex embajador de España en Venezuela, Raúl Morodo, y su entorno familiar están siendo investigados por presunto blanqueo de capitales y cohecho. Se les acusa de haber recibido comisiones millonarias de PDVSA a cambio de favores y contratos.
Caso Andorra: La Banca Privada d'Andorra (BPA) fue intervenida en 2015 por sospechas de blanqueo de capitales procedentes de Venezuela.
Caso Delcy Rodríguez: La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, fue investigada en España por un presunto delito de encubrimiento.
Pero igualmente preocupa la presencia de un grupo criminal llamado El Tren de Aragua. El Tren de Aragua es una organización criminal originaria de Venezuela que se ha expandido a varios países de Hispanoamérica, Estados Unidos y, más recientemente, Europa, incluyendo España.
Madrid y Barcelona han sido puntos focales de las actividades del Tren de Aragua
Esta organización criminal tiene claras vinculaciones con el régimen de Maduro, tal y como se demostró en el asesinato del Teniente Ojeda en Santiago de Chile. En España, las principales ciudades españolas como Madrid y Barcelona han sido puntos focales de las actividades del Tren de Aragua. Aquí se han reportado casos de extorsión, tráfico de drogas y explotación de migrantes.
Cuando el crimen organizado hace alianza con actores políticos, económicos y domina instituciones del Estado, las consecuencias son devastadoras para la gobernabilidad, la seguridad y el bienestar de la población.
Cuando vemos estos puntos de infección entre el crimen organizado y Europa, penetrando el sistema respiratorio y circulatorio de una sociedad, es claro predecir la amenaza de cómo estos grupos terminan controlando a un país y sus instituciones.
México y los carteles
Lo vemos en México con los carteles de droga y las elecciones presidenciales recientes. En Venezuela con Maduro y su Cartel de los Soles o El Tren de Aragua, o el Lava jato de Lula en Brasil. En Colombia con la narcoguerrilla, o en Bolivia y la vinculación de Morales con el narcotráfico. ¿Cómo podría ser en España?