¿Ganará con mayoría absoluta la RN de Le Pen? Estas son las claves

La formación de Marine Le Pen, con Bardella a la cabeza, busca una mayoría absoluta que, según todas las encuestas, era posible y hasta alcanzable hace semanas, pero podría quedarse, finalmente, a las puertas. Es decir, ser el primer partido en votos, pero no tener una mayoría absoluta para gobernar. Escenario parecido a lo que sucede al PP respecto al PSOE en España.

Lo que está claro es que los franceses se lanzarán, en esta segunda vuelta, para votar por la formación de una derecha sin complejos en nuestro vecino norteño. El primer dato de participación es de 7 puntos más que en 2022. En estas votaciones legislativas, se elegirán 501 diputados en competiciones individuales en cada circunscripción, después de que 76 candidatos de Agrupación Nacional (RN, por sus siglas en francés) ya lograron ser elegidos en la primera vuelta del domingo 30 de junio al alcanzar al menos el 50 % de los votos.

La situación actual de Macron es crítica. Lo que ha llevado a que más de 200 candidatos macronistas y de la izquierda se retiren de esta última votación para que otro aspirante mejor situado tenga más posibilidades de lograr el escaño frente a un rival de RN. El miedo y la angustia por una situación extrema para el partido presidencial (La Rèpublique En Marche!) se palpa. Aun así, se asegura que Macron no dimitirá del cargo, tal y como advierten los expertos en política geoestratégica consultados.

¿Qué se espera de la formación RN y por qué se ha disparado?

Sea como fuere RN arrasará comparado con las elecciones de hace cinco años ya que, en esta ocasión, aglutinará todavía más el voto de los descontentos. Hasta la comunidad judía se ha volcado en la formación de Le Pen «muy a nuestro pesar», tal y como nos traslada Sara abogada judía especializada en Derechos Humanos que trabaja en París y que prefiere ocultar su identidad por miedo a represalias de la izquierda radical.

Gracias a que Marine ha conseguido, de manera sorprendente, alejarse de las frases peyorativas que solía pronunciar su exaltado padre, que llegó a calificar de «detalle» las cámaras de gas de Hitler y manifestaba, al igual que ahora la izquierda, el desagrado por la culta y preparada comunidad judía que habita París.

Una clara defensa de lo francés mezclado con la intención de bloqueo a la inmigración creciente en Francia, es lo que ha decantado la balanza hacia RN. A lo que hay que añadir un proteccionismo económico cuando el país se encuentra sumido en medio de una de sus mayores crisis.

Por último, ha triunfado la imagen impecable tanto en forma como en fondo de Jordan Bardella que con tan sólo 28 años ha conseguido atraer a un público tanto de clase obrera (que ya lo tenía) como más intelectual.

Parece que la victoria de Le Pen es irremediable. Esperemos que la ‘Liberté, Égalité, Fraternité’ sigan primando. ¿O es invento francés?