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Consecuencia del atentado a Donald Trump

El atentado contra Trump se cobra la primer pieza: dimite la directora del Servicio Secreto de EE.UU.

El dispositivo de seguridad desplegado durante el mitin donde Donald Trump fue herido de bala en la oreja derecha, se cobra el puesto de Kimberly Cheatle

Tarde, pero lo hizo. La hasta ahora directora del Servicio Secreto estadounidense, Kimberly Cheatle, por fin, dimitió. Las críticas suscitadas por los errores en la seguridad del mitin en Butler (Pensilvania) en el que el expresidente Donald Trump (2017-2021) sufrió un intento de asesinato, le ha pasado finalmente factura.

Llama la atención que Cheatle, después de haber comparecido ayer durante cuatro horas frente en la Cámara de Representantes, no anunciara entonces su dimisión. Los congresistas la sometieron a un auténtico bombardeo de preguntas y censuraron el dispositivo que permitió el atentado al expresidente republicano.

Cheatle aceptó la responsabilidad por los fallos de seguridad que permitieron a Thomas Matthew Crooks disparar la AR-15 con la que atravesó la oreja derecha de Trump: «Hubo un colapso de la seguridad ese día» y prometo que en la investigación en curso «no dejaremos piedra sin remover», dijo durante su comparecencia la ya dimitida Kimberly Cheatle.

Los congresistas demócratas aprovecharon la ocasión para embestir contra la ley que permite la compra de armas prácticamente a cualquier ciudadano y que los republicanos defienden. Insistieron en que esa permisividad supone un riesgo para la seguridad pública y en especial, remarcaron el peligro de autorizar a cualquier mayor de edad comprar armas semiautomáticas como la AR-15 con la que Crooks disparó contra Trump.

El presidente republicano del Comité de Supervisión, James Comer, al abrir la audiencia, directamente pidió la renuncia de Cheatle. «Esta tragedia se podía prevenir y desde mi punto de vista, la directora Cheatle debería renunciar».

La actuación ha sido claramente un fracasoKimberly Cheatle

En ese momento, Cheatle no dio su brazo a torcer aunque reconoció el desastre. «La actuación ha sido claramente un fracaso» pero «creo que soy la mejor persona para liderar el servicio secreto ahora», se defendió la responsable hasta hace unas horas de la seguridad de los jefes de Estados y presidentes extranjeros de visita en estados Unidos y de la de los principales líderes políticos. Apenas 24 horas más tarde cambio de opinión o la hicieron cambiar de opinión.

El atentado a Trump y todo lo que le rodea tiene todos los ingredientes para convertirse una producción de Hollywood. Además de por los detalles mencionados, porque los agentes de seguridad no se habían dado cuenta de la presencia del francotirador. Fue la gente que acudió a ver y a oír a Trump a Pensilvania la que advirtió que había un hombre armado en aquel tejado.

La bala contra Trump vino precedida siete detonaciones. Uno de los proyectiles acabó con la vida del bombero Corey Comperatore, de 50 años, que perdió la vida al proteger con su cuerpo a su familia. Otras dos personas resultaron heridas.