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Nicolas Maduro, dictador venezolanoFederico Parra / AFP

Maduro rechaza cualquier tipo de negociación con la oposición y ofrece cárcel a María Corina Machado

El dictador venezolano señaló que el «83 % de los documentos» de la oposición «son falsos» e insiste en la teoría del jaqueo al Consejo Nacional Electoral

Luego que la líder opositora, María Corina Machado, ofreciera al chavismo como «régimen derrotado» una «negociación para la transición democrática», Nicolás Maduro rechazó cualquier negociación y más bien le dijo a Machado que «se entregue a la justicia».

En una entrevista con AFP, Machado aseguró que la oposición propone una «negociación para la transición democrática», que «incluye garantías, salvoconductos e incentivos para las partes involucradas, en este caso el régimen que fue derrotado en esa elección presidencial».

Maduro descartó cualquier contacto con la líder opositora. «El único que tiene que negociar en este país con la Machado es el fiscal general. Que se entregue ante la justicia y dé la cara y responda por los crímenes que cometió. De verdad es la única negociación que cabe aquí», dijo el dictador bolivariano, que la tachó de «prófuga de la justicia».

Las declaraciones de Maduro tuvieron lugar a la salida de una comparecencia ante la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) al que pidió «certificar» su fraudulenta reelección para un tercer período de seis años.

Maduro fue proclamado como presidente reelecto con el 52 % de los votos frente a un 43 % de Edmundo González Urrutia, pero el Consejo Nacional Electoral (CNE) no publicó el detalle del escrutinio alegando un jaqueo al sistema de votación. Hasta la fecha sigue sin hacerlo violando la práctica de ese organismo y el mandato de la ley electoral venezolana.

«Lo que diga el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela será ley de la República, será santa sentencia», dijo Maduro quien apuesta que a que el tribunal refrende su fraude y aplacar las críticas opositoras.

Otros ocho excandidatos presidenciales, minoritarios, también acudieron a la cita del TSJ, mientras que el principal opositor, González Urrutia, que de acuerdo con las actas publicadas en línea es el presidente electo de Venezuela, rechazó la citación alegando «violación del debido proceso».

Maduro señaló que el «83 % de los documentos» de la oposición «son falsos» e insistió -ante la negativa del CNE de publicar las actas- que «el ataque cibernético fue brutal: 30 millones de ataques por minuto a los sistemas electrónicos del CNE y Venezuela».

Enrique Márquez, excandidato presidencial y exrector del CNE, mostró dudas de los argumentos del régimen chavista ya que «no es fácil» falsificar las actas y señaló que el sistema «nunca» ha sido jaqueado porque es «muy difícil».

Observadores internacionales, como el Centro Carter, coinciden en las proyecciones del triunfo opositor, mientras Estados Unidos, la Unión Europea y países de Hispanoamérica, incluidos aliados de Maduro como Brasil, México y Colombia, exigen la publicación de las actas.

En cambio, el régimen chavista insiste en la ruta del fraude y el presidente del CNE, Elvis Amoroso, acudió el lunes a la TSJ y dijo haber entregado todo el material solicitado: actas de escrutinio de las mesas electorales, el acta de totalización definitiva y copia de la proclamación de Maduro.

La presidenta del Supremo, la chavista Caryslia Rodríguez, informó que el material será revisado en un lapso de 15 días, periodo que puede ser «prorrogable».