Carisma y línea dura, los perfiles de los candidatos para suceder el liderazgo de Kishida en Japón

La renuncia de Fumio Kishida a presentarse a la reelección como presidente del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD) en las primarias del próximo septiembre deja un horizonte incierto sobre el liderazgo del partido y del país, entre cuyos potenciales candidatos suenan perfiles carismáticos, pero también de línea dura.

Kishida anunció que dimitirá al frente del PLD para promover su «cambio» y «renovación» como parte de una una decisión ya rumoreada debido a su persistente baja popularidad provocada por las irregularidades de financiación en su partido, los destapados vínculos de algunos miembros con un culto religioso a raíz del magnicidio de Shinzo Abe y otros problemas en tres años de mandato.

Su salida de la presidencia de la formación política resultará también en su abandono como primer ministro, pues en Japón la jefatura de gobierno la ocupa el líder del partido más votado, independientemente de si presidía o no la formación en el momento de la celebración de las elecciones generales.

La carrera electoral por la presidencia del PLD, prevista para finales de este próximo mes de septiembre, se convierte así no sólo en una lucha por el poder interno del partido, sino del país.

A falta de la presentación oficial de candidaturas, son varios los nombres que suenan para suceder a Kishida, entre ellos el de varios exministros carismáticos que gozan de popularidad entre el público, pero no tanto entre los miembros de la formación, o algunos de perfiles de línea dura que gozan del favor interno.

Ya suenan algunos nombres

De acuerdo con EFE, hasta el momento, el exministro de Defensa Shigeru Ishiba, de 67 años, muy popular entre el público, ha expresado su intención de concurrir en los comicios internos.

Ishiba, que en su día fue secretario general del PLD, la segunda figura de más peso en la formación, se ha postulado para el cargo en cuatro ocasiones, sin éxito hasta el momento.

El ministro de Digitalización, Taro Kono (61), que ya intentó disputarle el puesto a Kishida en las anteriores primarias de 2021, también habría informado al vicepresidente del PLD y ex primer ministro Taro Aso de su intención de presentarse en esta ocasión.

Kono, un parlamentario inconformista con mentalidad reformista y mano para las redes sociales –es el político japonés con más seguidores en ellas–, es uno de los perfiles más 'jóvenes' y reformistas, aunque cuenta con la reticencia de ciertas facciones.

Otro de los políticos que habrían manifestado -según medios locales- su deseo de concurrir en las primarias es la ministra de Seguridad Económica, Sanae Takaichi (63), de corte más conservador y considerada discípula y una de los mayores herederos espirituales del ex primer ministro Abe.

Los nombres del exministro de Exteriores y actual secretario general del PLD, Toshimitu Motegi (68); del exministro de Medioambiente Shinjiro Koizumi (43), hijo del ex primer ministro Junichiro Koizumi; del exministro de Seguridad Económica Takayuki Kobayashi (49) o la exministra del Interior y Comunicaciones Seiko Noda (63), que ya disputó la presidencia a Kishida en las primarias anteriores, también suenan entre los que podrían concurrir a la contienda interna que también definirá la jefatura del Gobierno nipón.