La guerra de las basuras: Corea del Norte vuelve a mandar globos de desechos al Sur
Las relaciones entre las dos Coreas viven uno de sus peores momentos, con Pionyang habiendo declarado a principio de año a Seúl como principal enemigo nacional y descartando la reunificación pacífica
Corea del Sur ha vuelto a acusar a su vecino del Norte de lanzar cerca de 190 globos llenos de basura a través de la frontera, en un conflicto que ya se ha bautizado como 'la guerra de las basuras'. Los globos han llegado en esta ocasión hasta la capital, Seúl, así como a sus alrededores.
El Estado Mayor del Ejército surcoreano ha manifestado que los lanzamientos se iniciaron a última hora del viernes y continuaron hasta primera hora del sábado, antes de detallar que todos estaban llenos con papeles, trozos de plástico y botellas, según la agencia surcoreana de Yonhap.
Desde mayo, Pionyang ha enviado más de 3.000 globos llenos de basura en protesta por los folletos de propaganda contrarios al régimen que envían a su vez en globos activistas desde Corea del Sur.
Estas acciones, junto con los intentos por interferir en el sistema GPS en el entorno de la península coreana por parte del régimen de Pionyang, llevaron a Seúl a suspender el 4 de junio pasado el tratado para rebajar la tensión militar en zonas fronterizas que había firmado con el Norte en 2018.
Tras suspenderse ese pacto, el Ejército surcoreano reinstaló sus altavoces con propaganda criticando al régimen en la frontera y ha estado haciendo emisiones en respuesta a las sueltas de globos.
Las relaciones entre las dos Coreas viven uno de sus peores momentos, con Pionyang habiendo declarado a principio de año a Seúl como principal enemigo nacional y descartando la reunificación pacífica.
A su vez, el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, anunció en agosto el primer cambio en la llamada doctrina de reunificación en tres décadas, poniendo como prioridad la mejora de los derechos humanos en el país vecino.
Muchos expertos creen que este planteamiento no solo generará rechazo en el régimen de Kim Jong-un, sino que incluso podría incrementar sus acciones hostiles contra el Sur.