El líder supremo de Irán pide a los países musulmanes «unirse para destruir» a Israel
Ali Jameneí también hizo un llamamiento a cortar lazos económicos con el Estado hebreo tras los ataques contra Hezbolá en el Líbano
El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, instó a los países musulmanes a cortar sus vínculos económicos y reducir sus lazos políticos con Israel, en medio de la escalada de tensiones en Oriente Medio, tras los ataques israelíes contra las milicias de Hezbolá, aliadas de Irán, en el Líbano.
«El primer paso en la unidad del mundo islámico contra esta banda criminal y terrorista que gobierna Palestina y que usurpó el territorio palestino es que los países islámicos corten por completo sus relaciones económicas con esta banda criminal», aseveró Jameneí en un encuentro con las autoridades del país, los embajadores de los países islámicos e invitados a la 38.ª Conferencia de Unidad Islámica, en Teherán, según informó la agencia estatal IRNA.
El líder supremo iraní pidió además a los países musulmanes «reducir sus lazos políticos y fortalecer los ataques mediáticos» contra Israel, ante sus «crímenes» en Gaza, Cisjordania, Siria y Líbano.
Jameneí aprovechó el aniversario del natalicio del profeta del islam, Mahoma, para llamar a la comunidad islámica a «unirse y utilizar su fuerza interior para destruir» a Israel.
«Este poder interno puede eliminar y erradicar este malvado tumor canceroso del corazón de la comunidad islámica y destruir la influencia, el dominio y la interferencia coercitiva de Estados Unidos en esta región», enfatizó el líder del régimen iraní.
Estas palabras se producen unos días después del masivo ataque con buscapersonas y 'walkie-talkies' en el Líbano, atribuidos a Israel, que dejaron 37 muertos y 3.200 heridos, entre ellos el embajador iraní en Beirut, Mojtaba Amani.
Irán, que capitanea la alianza informal antiisraelí 'Eje de la Resistencia', formada por los grupos terroristas Hezbolá, el Hamás palestino y los hutíes del Yemen, entre otros, ha condenado las ofensivas.
La República Islámica de Irán e Israel son enemigos acérrimos, suponen una amenaza existencial mutua, compiten por la hegemonía regional y durante más de cuatro décadas han mantenido una guerra encubierta con ciberataques, asesinatos y sabotajes.
A finales de julio, el líder de Hamás, Ismail Haniyeh, fue asesinado en Teherán durante la investidura del presidente iraní, Masud Pezeshkian, y el país persa prometió una dura venganza contra Israel, el cual aún no se ha producido.
Sin embargo, en abril, Teherán atacó directamente el territorio israelí con cientos de misiles y drones en respuesta al bombardeo de la embajada iraní en Siria, atribuido a Tel Aviv, que causó la muerte de 7 miembros de la Guardia Revolucionaria iraní.