La increíble historia de una mujer británica que asesinó a sus padres y ocultó el crimen durante cuatro años

En septiembre de 2023, la policía de Essex, Inglaterra recibió una llamada del equipo de protección del Consejo del Condado de Essex tras el aviso de un médico de cabecera que había expresado su preocupación por su bienestar de la pareja de John y Lois McCullough, ya que no los había visto durante algún tiempo en la consulta.

Sus ausencias habían sido explicadas por su hija Virginia, quien ofrecía una serie de excusas para cada cita que cancelaba en nombre de sus padres. Convenientemente para ella, Reino Unido había estado en confinamientos forzados por Covid durante un largo período de tiempo en el que no se les había visto.

Según relata la BBC, Virginia pidió a los familiares que se mantuvieran alejados de la casa y le dijo a los amigos que sus padres se habían retirado al área de Clacton en la costa soleada de Essex. Pero cuando la policía habló con McCullough, quedó claro que algo no cuadraba: ¿por qué sus padres siempre estaban fuera del área?. Las sospechas crecieron tras una llamada de ella cancelando abruptamente el alquiler en nombre de sus padres.

Pasarían cuatro años antes de que alguien descubriera los horrores que tuvieron lugar a puerta cerrada en la casa familiar.

John, un profesor jubilado de estudios empresariales, había sido envenenado fatalmente y el cuerpo del hombre de 70 años estaba escondido en una tumba toscamente construida.

El cadáver de su esposa de 71 años, Lois, estaba escondido detrás de sacos de dormir y edredones en un armario del piso de arriba. La mujer había sido golpeada con un martillo y apuñalada, pero también había sido envenenada con medicamentos suministrado por su hija.

Virginia, de 36 años, se aprovechó de las pensiones de sus padres después de asesinarlos y les dijo a los oficiales al momento del arresto: «Anímense, al menos han atrapado al malo».

De acuerdo con la BBC, los documentos recuperados dentro de la propiedad pintaron una imagen de una mujer que intentaba desesperadamente evitar que sus padres descubrieran un fraude financiero.

Abusando de la buena voluntad de sus padres, ella había estado viviendo sin pagar alquiler, gastando el dinero de la pareja y acumulando grandes deudas en tarjetas de crédito a nombre de sus padres.

Las cartas falsificadas mostraron que Virginia había estado engañando a sus padres para que pensaran que habían perdido dinero a través de estafas. En realidad, era dinero «malgastado».

En total, la mujer se benefició de 149.697 libras esterlinas como resultado del asesinato de sus padres, combinado con sus pensiones y el gasto en sus tarjetas de crédito, así como la venta de activos de la pareja. Virginia también gastó 21,000 libras esterlinas en juegos de azar en línea entre 2019 y 2023.

Sus mentiras, y el miedo a ser expuesta, finalmente la llevaron a matar cruelmente a sus padres. El Tribunal de Chelmsford la condenó el viernes a cadena perpetua por ambos asesinatos.