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Las fuerzas de seguridad israelíes se reúnen en las cercanías de la residencia de Benjamín Netanyahu en CesareaAFP

Hezbolá reivindica el ataque mediante drones explosivos contra la residencia de Netanyahu en Cesarea

El ataque sólo provocó daños materiales en los alrededores de la residencia ya que tanto Netanyahu como su mujer, Sarah, no se encontraban en este domicilio

Hezbolá ha reivindicado, este martes, el ataque con drones explosivos contra la residencia privada del primer ministro israelí, Benjamin Netanayahu, en la localidad de Cesarea (ubicada en el centro de Israel) este sábado.

Mohammad Afif Naboulsi, el portavoz de la milicia chií libanesa de Hezbolá, anunció durante un discurso televisado que «la resistencia reivindica la plena y exclusiva responsabilidad de la operación contra Cesarea y el ataque contra la vivienda del criminal de guerra y líder de la lacra sionista» Benjamín Netanyahu.

Naboulsi fue más allá y ha amenazado directamente al primer ministro israelí: «Los ojos de los combatientes de la resistencia ven y sus oídos oyen. Si nuestras manos no alcanzan (a Netanyahu) esta vez, habrá días, noches y el suelo entre tú y nosotros».

Afif ha aprovechado para comunicar que «la milicia está bien y sus líneas de apoyo han vuelto a ser lo que eran». Además, ha incidido en que «el ritmo diario de ataques y operaciones contra el enemigo sionista aumenta constantemente».

El portavoz de Hezbolá asegura que «el enemigo continua con sus locos bombardeos de ciudades y pueblos, cayéndose todos sus pretextos ya que sólo tienen deseo de más matanzas y destrucción».

El ataque del fin de semana únicamente provocó daños en los alrededores de la residencia, tanto Netanyahu como su mujer, Sarah, no se encontraban en el lugar en el momento del impacto del avión no tripulado.

Este bombardeo teledirigido que no ha dejado ninguna víctima mortal ha sido atribuido a los agentes de Irán como un gesto violento en represalia por la muerte de Yahya Sinwar, el líder del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).

Aún así, el primer ministro israelí advirtió a Hezbolá que «esto no nos disuadirá a mí ni al Estado de Israel de continuar la guerra de resurgimiento contra nuestros enemigos».

El político afirmó que «cualquiera que dañe a los ciudadanos del Estado de Israel pagará un alto precio por ello». «Seguiremos eliminando a sus terroristas», concluyó.