Elecciones Estados Unidos 2024  Los multimillonarios prefieren a Trump, pero los medios le hacen la campaña a Harris

Las encuestas siguen pronosticando un resultado muy ajustado para las elecciones presidenciales que se celebran el próximo martes 5 de noviembre. Entrando en la recta final de campaña, a tan solo una semana de la cita con las urnas, lo que sí ha quedado claro son los apoyos principales con los que cuentan ambos candidatos más allá del voto popular. Los multimillonarios prefieren a Donald Trump, pero los medios de comunicación venden a Kamala Harris como la mejor opción.

El poder del dinero de los grandes de Silicon Valley frente al poder que tienen los grandes medios de comunicación para generar opinión pública. No obstante, que los empresarios más conocidos se hayan decantado por Trump a la hora de invertir en campaña, no ha evitado que Harris haya conseguido más del doble. Según los datos recogidos en la Comisión Federal Electoral (FEC por sus siglas en inglés), la demócrata ha recibido contribuciones por un total de 997.236.360 millones de dólares, mientras que el republicano se queda atrás con 388.097.229 millones de dólares.

Elon Musk es uno de los donantes principales de la campaña de Donald Trump. El New York Times anunciaba hace pocos días que el dueño de X (antes Twitter) había alcanzado ya el máximo legal de aportaciones para las elecciones presidenciales de 2024. Se implicó hasta el punto de fundar la America PAC, un Comité de Acción Política al cual otros particulares o empresarios pueden realizar otras donaciones. Y, a pesar de la cuestionada legalidad, realiza diariamente un sorteo de un millón de dólares entre los votantes de determinados estados.

Pero, según recoge la revista Forbes, el mayor donante de Trump —al menos sobre el papel— no es el Elon Musk, que habría donado 120 millones, sino que sería Timothy Mellon con una cantidad total que ronda los 150 millones de dólares. En la larga lista de multimillonarios que han ido aportando cantidades a la campaña republicana se encuentran nombres como el de Linda McMahon, esposa del empresario y promotor de lucha libre Vince McMahon; Kelcy Warren, director de una gran energética, o Diane Hendricks, fundadora de la empresa de suministros ABC Supply.

Es casi medio de centenar de multimillonarios los que apoyan a Donald Trump, pero los que apoyan a Kamala Harris no son menos, ni menos conocidos ni menos multimillonarios. Antes de que Joe Biden abandonase la carrera a la presidencia de los Estados Unidos ya había conseguido el apoyo de grandes empresarios para la campaña. Entre ellos están Michael Bloomberg, quien fuera alcalde de Nueva York, empresario y fundador del medio de información económica y financiera bautizado con su apellido.

El resto no son menos conocidos, ya sea por nombre o compañía a la que pertenecen o de la que colocaron los cimientos. Están Reid Hoffman, cofundador de LinkedIn, Reed Hastings, cofundador de Netflix, Sheryl Sandberg, exdirectora de operaciones de Meta. De hecho, más de 800 inversores y otros líderes tecnológicos han firmado un manifiesto de apoyo a la candidata demócrata desde que empezó la campaña. Sin olvidar tampoco al ultraconocido fundador de Microsoft, Bill Gates, que habría apoyado a Kamala Harris con 50 millones de dólares, según contó el empresario en privado a The New York Times.

Sí, Donald Trump ha recibido el apoyo de las mayores fortunas de los Estados Unidos, con grandes aportaciones individuales de cada uno, pero Kamala Harris también cuenta con el respaldo de otros empresarios que, eso sí, quizá tienen menos influencia.

«La única opción patriótica»

¿Y si ponemos el foco sobre los medios de comunicación? En este sentido también ha habido sorpresas de última hora. The New York Times, una de las cabeceras más leídas y prestigiosas de los Estados Unidos decidió colgar a Kamala Harris la etiqueta de «única opción patriótica para ser presidente» en su tradicional editorial de la recta final de campaña.

Un día antes, los editores de la revista semanal The New Yorker, publicaban un llamamiento al voto para la opción demócrata con un «Kamala Harris for president». Un extensísimo artículo en el que apoyan a Harris señalando las debilidades de Donald Trump y no tanto las fortalezas de la candidata a la que defienden.

La sorpresa la daba el Washington Post —cabecera propiedad de Jeff Bezos, también presidente ejecutivo de Amazon— que ha evitado posicionarse por ninguno de los dos candidatos a la Casa Blanca. Según contaron los propios periodistas del medio fue una decisión del propio Bezos, ya que el consejo editorial del Post ya tendría redactado su manifiesto en apoyo de un candidato y el empresario ordenó frenar la publicación.

Es la primera vez desde hace décadas que este periódico decide no posicionarse en la recta final de campaña de cara a las elecciones presidenciales. De hecho, Marty Baron, exdirector del Washington Post hasta 2021, cargó duramente contra Donald Trump, al que acusó de intimidar al propietario Jeff Bezos. Además calificó la decisión del Post como un «acto de cobardía de la que la democracia es víctima».