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Una manifestantes detenida en Nottingham (Inglaterra) mientras protestaba por los apuñalamientos de SouthportAFP

El acusado de matar a tres niñas este verano en Reino Unido enfrenta cargos por terrorismo por tener un manual de Al Qaeda

Axel Rudakubana fue acusado en julio de tres cargos de asesinato en las muertes de Alice Dasilva Aguiar, de 9 años, Elsie Dot Stancombe, de 7 años, y Bebe King, de 6 años, en la ciudad costera de Southport en el noroeste de Inglaterra

El joven Axel Rudakubana, de 18 años, que apuñaló a tres niñas este verano en Reino Unido compareció ante la corte este miércoles para enfrentar nuevos cargos por posesión de un veneno mortal y un cargo de terrorismo por tener un manual de entrenamiento de Al Qaeda.

Según ha detallado la jefa de Policía de Merseyside, Serena Kennedy, estas acusaciones por terrorismo se enmarcan en una causa separada al ataque contra una escuela de baile el pasado mes de julio, cuando el atacante apuñaló a tres menores y dejó casi una decena de heridos, según informaciones recogidas por Sky News.

Kennedy ha detallado que el acusado se enfrenta así a un cargo por «producción de una toxina biológica, concretamente ricina», y también a un cargo de terrorismo por posesión de información «probablemente útil para una persona que comete o prepara un acto de terrorismo». En concreto se trata de un archivo titulado Estudios militares en la Yihad contra los tiranos: El manual de entrenamiento de Al Qaeda.

Rudakubana, de padres ugandeses, fue acusado en julio de tres cargos de asesinato en las muertes de Alice Dasilva Aguiar, de 9 años, Elsie Dot Stancombe, de 7 años, y Bebe King, de 6 años, en la ciudad costera de Southport en el noroeste de Inglaterra.

También ha sido acusado de otros diez cargos de intento de asesinato por los ocho niños y dos adultos que resultaron gravemente heridos. Leanne Lucas, quien dirigía la clase, y John Hayes, quien trabajaba en un negocio cercano y corrió a ayudar, fueron reconocidos por la Policía por intentar proteger a las niñas.

Este escabroso caso provocó fuertes disturbios que se extendieron por Inglaterra e Irlanda del Norte y duraron una semana. Más de 1.200 personas fueron arrestadas por el desorden y cientos han sido encarceladas.