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La vicepresidenta Kamala Harris y la presidenta de la Cámara de Representantes, la californiana Nancy PelosiEFE

Elecciones en Estados Unidos 2024

Aparecen las primeras fisuras dentro del Partido Demócrata: Pelosi culpa a Biden de la derrota de Kamala Harris

La congresista demócrata, que acaba de renovar su escaño en la Cámara de Representantes, fue de las primeras en pedir abiertamente al presidente de Estados Unidos que se retirara de la carrera hacia la Casa Blanca frente a Donald Trump

Desde la arrolladora victoria en las elecciones del pasado martes del candidato republicano, Donald Trump, sobre la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, el Partido Demócrata apenas ha hecho autocrítica sobre qué ha propiciado su derrota, al menos públicamente. La sorpresa fue tal para los azules que Harris, que tenía preparado un gran despliegue en la Universidad de Howard, en Washington D. C., para celebrar su triunfo, salió por la puerta de atrás, sin dedicar ni una sola palabra a los allí congregados. Sin embargo, tres días después, los demócratas empiezan a mostrar fisuras. En una entrevista a The New York Times, la expresidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, ha culpado al actual mandatario Joe Biden de la derrota de Harris.

Pelosi, que a sus 84 años es considerada una de las políticas más influyentes en Washington, confesó al periódico estadounidense que «si el presidente hubiera salido antes, podría haber habido otros candidatos en la carrera». La congresista estadounidense fue de las primeras que se atrevió a pedir abiertamente la retirada de Biden como candidato en las elecciones de pasado 5 de noviembre, sobre todo, tras su mal desempeño en el primer debate electoral contra Trump, el 27 de junio. Pelosi llegó a llamar personalmente al mandatario, según publicó la CNN, días después de la emisión del cara a cara entre los dos rivales, para advertir a Biden de que su empeño por presentarse a la reelección podía «destruir» las posibilidades de los demócratas de ganar los comicios.

Dados los resultados, Pelosi, que consiguió renovar su escaño en la Cámara de Representantes, no se equivocaba entonces. En su entrevista a The New York Times, la política demócrata reprocha ahora a Biden que decidiera seguir su consejo demasiado tarde, sin tiempo suficiente para que el Partido Demócrata pudiera remontar frente a Trump. «La perspectiva era que, si el presidente se apartaba, habría unas primarias abiertas», explica Pelosi. Sin embargo, ese proceso nunca tuvo lugar. Inmediatamente después de su renuncia, el pasado 22 de julio, el presidente estadounidense apoyó la candidatura de su vicepresidenta y hasta entonces prácticamente desconocida, Kamala Harris. Biden, en un discurso televisado, explicó entonces que era el momento de «dar el relevo a una nueva generación».

Así, aprovechó para destacar el perfil de Harris y anunciar su carrera hacia la Presidencia de Estados Unidos. «Tiene experiencia. Es dura. Es capaz. Ha sido una socia increíble para mí y una líder para nuestro país», subrayó Biden. Sin embargo, durante sus cuatro años como vicepresidenta ha pasado completamente desapercibida. Uno de sus mayores retos ha sido la inmigración. Tarea en la que ha fallado y le ha lastrado en sus aspiraciones hacia la Casa Blanca. Lejos de criticar a Kamala, que ha perdido apoyos entre todos los grupos y minorías que tradicionalmente votaban al Partido Demócrata –hispanos, mujeres o afroamericanos–, los asesores de campaña de la vicepresidenta también han cargado contra Biden. «Joe Biden es la única razón por la que Kamala Harris y los demócratas han perdido esta noche», declararon varios colaboradores de Harris a Politico.

Quien ha hecho una lectura completamente diferente de la derrota de Harris frente a Trump ha sido el senador independiente Bernie Sanders. El político, que se presentó a las primarias demócratas para las elecciones presidenciales de 2016 y 2020, acusó al partido de haber abandonado a la clase trabajadora estadounidense y haberse convertido en el altavoz del establishment y los acomodados. «Mientras los líderes demócratas defienden el statu quo, el pueblo estadounidense está enfadado y quiere un cambio», reflexionó en un comunicado que hizo público a través de sus redes sociales, tras conocerse los resultados. «Tienen razón», concluyó.