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Kim Jong Un durante su intervención en la Conferencia del batallón de Comandantes e Instructores de Corea del Norte, en PyongyangEFE

Guerra Ucrania Rusa

Kim Jon-un cierra filas con Putin y acusa a Occidente de echar más leña al fuego de la guerra de Ucrania

El dictador norcoreano advierte de que el conflicto bélico podría ser la antesala de una III Guerra Mundial

Kim Jong-un cierra filas con Vladimir Putin y vuelve al ataque. El dictador norcoreano ahora acusa a Occidente de provocar y alimentar la guerra de Ucrania para expandir «su intervencionismo militar al mundo entero».

En un discurso pronunciado en Pionyang, durante la Conferencia de Comandantes e Instructores militares anual, el «único líder» advirtió que el mundo podría estar a las puertas de una III Guerra Mundial.

En un momento crítico entre Ucrania y Rusia, tras el anuncio de Joe Biden de permitir a Kiev usar misiles de largo alcance y el envío de tropas de Pionyang para apoyar a Moscú en la contienda, Kim aseguró: «Debemos considerar la guerra contra Rusia, que están librando Estados Unidos y Occidente como avanzadilla en Ucrania, como una guerra para aumentar su experiencia práctica y ampliar el alcance de su intervencionismo militar al mundo entero».

«Mientras los mercaderes de la guerra de Estados Unidos continúan brindando apoyo militar a Ucrania e Israel, más países se ven atrapados en la guerra y la situación de seguridad internacional se torna más peligrosa, lo que aumenta la ansiedad con respecto a que pueda estallar una III Guerra Mundial», añadió Kim en una larga alocución publicada por la agencia estatal de noticias KCNA, frente a la plana mayor de comandantes e instructores militares.

10.000 soldados norcoreanos a la región rusa de Kursk para apoyar a Moscú

El último dictador de la sempiterna dinastía norcoreana no hizo mención al envío de unos 10.000 soldados norcoreanos a la región rusa de Kursk para apoyar a Moscú en su ofensiva contra Kiev, una acción confirmada por Washington, la OTAN o Seúl que el régimen no ha comunicado aún a sus ciudadanos.

Por otra parte también acusó a la alianza militar entre Corea del Sur, Japón y EE.UU. de ser un factor capital que amenaza la paz y la estabilidad en Asia-Pacífico y la península coreana al realizar maniobras militares conjuntas y desplegar armamento estratégico, y consideró que los tres están buscando formar una «OTAN asiática» mientras arrastran a la región a miembros de la Alianza Atlántica y otros aliados.

«En definitiva, la alianza militar liderada por EE.UU. se está expandiendo a un ámbito más amplio que abarca Europa y la región de Asia-Pacífico, y el peso de su agresión se está concentrando nada menos que en nuestro país, el enemigo hostil y beligerante más antiguo de Estados Unidos», aseguró el líder norcoreano.

Ante estas acusaciones, Kim consideró necesario seguir fortaleciendo la defensa nacional ante la posibilidad de que estalle un conflicto siempre en mente.

«Permítanme enfatizar una vez más que la tarea más importante y vital para nuestras Fuerzas Armadas es la guerra, la preparación para encarar la guerra», afirmó el dictador, que aseguró que Corea del Norte seguirá «fortaleciendo el poder de autodefensa del país centrado en las armas nucleares».