Esta es la guía que reciben por correo los suecos ante la amenaza de un ataque nuclear ruso
Suecia ha comenzado a distribuir un manual de emergencia a sus ciudadanos titulado «Si llega una crisis o una guerra», en un esfuerzo por prepararlos ante posibles escenarios de conflicto armado, ataques nucleares, ciberataques y desastres naturales. Este documento, elaborado por la Agencia Sueca de Contingencias Civiles (MSB), será enviado a cinco millones de hogares y contiene instrucciones prácticas sobre cómo actuar en caso de emergencias, incluyendo la recomendación de almacenar alimentos, agua y suministros básicos para al menos siete días.
El manual, que se distribuye en varios formatos y lenguajes, subraya la importancia de estar preparados «en un mundo cada vez más inseguro». Ofrece guías detalladas para identificar refugios seguros, reaccionar a las sirenas de alarma nacionales y garantizar la autosuficiencia ante posibles interrupciones de servicios. También aborda la necesidad de mantener la calma en situaciones de crisis, combatir la desinformación y reforzar la unidad nacional frente a amenazas externas. Además, recalca que todos los suecos de entre 16 y 70 años tienen responsabilidades en caso de guerra, desde el apoyo logístico hasta la defensa civil, dejando claro que la defensa del país es tarea de toda la población.
La publicación de este manual se produce en un contexto de creciente tensión internacional, particularmente por la guerra en Ucrania. La reciente actualización de la doctrina nuclear rusa, según la cual cualquier ataque significativo contra su territorio por parte de una coalición extranjera será considerado una agresión directa contra Rusia, aumenta el riesgo de represalias y ha puesto a las naciones que hacen frontera con el país soviético en estado de máxima alerta.
Este clima de incertidumbre ha llevado a Suecia, que recientemente solicitó su ingreso en la OTAN, a reforzar su preparación nacional. El manual también aborda otros temas clave, como la gestión de la ansiedad en niños durante emergencias, la importancia de almacenar agua potable y alimentos no perecederos, y cómo identificar señales oficiales de alarma. En paralelo, el gobierno insiste en la importancia de no depender exclusivamente de las autoridades, instando a los ciudadanos a ser autosuficientes en caso de crisis.
Suecia sigue el ejemplo de otros países nórdicos, como Noruega y Finlandia, que han distribuido materiales similares. Mientras tanto, en España no existe un documento comparable, lo que ha generado debate sobre la necesidad de medidas preventivas en un contexto internacional cada vez más volátil. Ante este escenario, el mensaje sueco es claro: «Si Suecia es atacada, nunca nos rendiremos. La responsabilidad de proteger nuestra independencia y democracia recae en cada ciudadano».