Juan Pablo Guanipa, exvicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela
«El mundo militar se está moviendo en Venezuela»
El abogado y político venezolano concede una entrevista a El Debate, una semana después de que Nicolás Maduro ejecutara su asalto el poder, para explicar cuáles son los siguientes pasos de la oposición para hacer frente al régimen chavista
La última persona con la que la líder de la oposición venezolana, María Corina Machado (MCM), estuvo antes de ser retenida por las fuerzas de seguridad chavistas y volver a la clandestinidad el pasado 9 de enero fue el ex primer vicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Pablo Guanipa. El abogado y político venezolano también salió de su lugar seguro, tan solo un día antes de que el autócrata Nicolás Maduro se autocoronara presidente ante el rechazo absoluto de la comunidad internacional y los propios venezolanos, para arropar a MCM en la manifestación masiva en contra del heredero de Hugo Chávez y a favor de la investidura del ganador de las elecciones del pasado 28 de julio, Edmundo González Urrutia.
Guanipa (60 años), vive en Maracaibo, ciudad situada al noroeste de Venezuela, tiene cinco hijos, con edades entre 15 y 18 años, y hace tan solo nueve meses tuvo que afrontar la muerte de su mujer. Aun así, el opositor, que también sufre el acoso del régimen chavista, no ha desistido en ningún momento en su lucha por la democracia y la libertad. Está convencido de que ese día está cerca y que Maduro afronta un momento crítico. Sin embargo, el golpe de Estado perpetrado por el autócrata juramentándose como presidente el pasado 10 de enero y la imposibilidad de González Urrutia de entrar en Venezuela como prometió han supuesto un duro revés para la oposición, por ello, Guanipa, en una entrevista con El Debate, confiesa que «es fundamental rescatar y mantener el espíritu del 28 de julio».
— ¿Cuáles son los próximos pasos de la oposición ahora que Maduro ha consumado su farsa?
— En primer lugar, es necesario dejar claro que Maduro es un usurpador. Edmundo González Urrutia es el presidente legítimo de Venezuela y logramos demostrar su triunfo en las elecciones del pasado mes de julio. Una vez aclarado esto, en este momento, la alternativa democrática tiene la responsabilidad de saber con quién cuenta. Tenemos que revisar quiénes seguimos apoyando incondicionalmente los resultados del 28 de julio. Esa histórica jornada, el pueblo decidió un cambio político. No se concretó porque Maduro y sus cómplices presentaron un boletín falso de un resultado electoral.
Para nosotros es fundamental rescatar y mantener el espíritu del 28 de julio y lograr que quien se juramente, cuando se den las condiciones, sea quien ganó esa elección que es Edmundo González. Debemos unirnos todos alrededor del objetivo de lograr el cambio político en Venezuela y mantener viva la desobediencia civil, la lucha no violenta y la resistencia pacífica para generar presión interna. Además, esa presión interna debe ir acompañada simultáneamente de una presión internacional. Confiamos en que Donald Trump, como presidente de Estados Unidos, ayude a la socavación de las bases que todavía sustentan a Nicolás Maduro en el poder.
— ¿Por qué finalmente Edmundo González decidió no ir a Venezuela el 10 de enero para investirse como presidente?
— Desafortunadamente, las circunstancias no le acompañaron. No fue únicamente que el régimen dictatorial de Maduro cerró el espacio aéreo y las fronteras terrestres, sino que tampoco se consiguió que el sector militar se pronunciara. En definitiva, no se lograron generar las condiciones para que Edmundo González Urrutia pudiera estar en Venezuela y juramentarse como presidente.
— ¿Confían en que en algún momento el sector militar se rebele contra el régimen de Maduro?
— Es necesario estudiar bien al sector militar. Durante la campaña electoral, Maduro obligó a los militares y a los policías a que se cambiaran de centro de votación para tenerlos controlados en centros especiales. Aun así, Nicolás Maduro perdió y ganó Edmundo González, lo que quiere decir que dentro del mundo militar algo está pasando. Casi 200 militares están detenidos en Venezuela en este momento, lo que es una clara señal de que algo se está moviendo dentro del mundo militar, pero todavía no ha emergido a la superficie.
Hay que recordar también que la Inteligencia militar no la hacen venezolanos, sino cubanos y rusos, que tienen una gran experiencia en este campo, lo que ha permitido mantener absolutamente controlado al estamento militar venezolano. Que esto termine por explotar dependerá de la presión interna y de la presión internacional, no van a rebelarse solos.
Casi 200 militares están detenidos en Venezuela en este momento, algo se está moviendo dentro del mundo militarExvicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela
— ¿Teme que pueda producirse un paralelismo con el caso de Juan Guaidó?
— No, son dos casos absolutamente distintos. En esta ocasión, tenemos un presidente electo por el pueblo y conseguimos demostrar los resultados electorales, con las actas en la mano, ante el mundo entero. Edmundo González Urrutia es realmente el presidente electo de Venezuela y Maduro perdió en absolutamente todos los estados del país.
— ¿Cómo vivió los momentos previos y posteriores a la detención de María Corina Machado durante la manifestación del pasado 9 de enero?
— Tras terminar el acto, ambos abandonamos el lugar por separado para buscar un sitio seguro. Siempre que hemos asistido a este tipo de convocatorias hemos sufrido una persecución. Yo salí de allí y había una persona detrás de mí que iba siguiendo mis pasos, pero logré salir ileso y llegar a un sitio de resguardo. No fue hasta que conseguí estar en un lugar seguro cuando me enteré de que María Corina había sido detenida.
Sabía que antes o temprano la soltarían, era un coste demasiado elevado para el régimen mantener detenida a María Corina y, en efecto, así fue. Durante su detención, fue víctima de violencia. Ella misma contó que tiene contusiones en su cuerpo, producto del maltrato que recibió. La intención era trasladarla a la Dirección General de los Servicios de Inteligencia Militar (DGCIM). Pero, en el camino, hubo una contraorden y la contraorden fue que la soltaran, lo que refleja las contradicciones internas que existen en el propio régimen.
— ¿Cree necesaria una intervención humanitaria en Venezuela, como pidió el expresidente colombiano Iván Duque?
— Es un tema muy complicado. Yo siempre he creído que el mayor esfuerzo tiene que venir de los propios venezolanos. Nosotros vamos a ser quienes consigamos que se rompa este cántaro. La posibilidad de una intervención humanitaria genera un efecto negativo, ya que desmoviliza a los propios venezolanos que entonces prefieren esperar a que vengan otros a salvarlos.
— ¿Qué espera entonces de la comunidad internacional?
— Esperamos una mayor presión, por ejemplo, a través de sanciones económicas. También tenemos que lograr pronunciamientos de la Corte Penal Internacional, así como de organismos internacionales como la ONU.
— ¿Cómo valora el papel de José Luis Rodríguez Zapatero en la crisis venezolana?
— La actuación de Rodríguez Zapatero ha estado marcada, a mi modo de ver, por el apoyo directo o indirecto a Nicolás Maduro. Yo quisiera verlo defendiendo la democracia y la libertad de Venezuela. Eso es lo que necesitamos los venezolanos.
Lamento profundamente las medias tintas de SánchezExvicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela
— ¿Qué opina de la postura del Gobierno español que aún no ha reconocido a Edmundo González como presidente de Venezuela?
— No me gustan las actitudes ambiguas. Creo que cuando se trata de la democracia, la libertad y el Estado de derecho no hay medias tintas. Y lamento profundamente las medias tintas de Sánchez, que lo único que está haciendo es reconocer indirectamente a Maduro.