¿Quiénes son los 33 rehenes israelíes que Hamás liberará durante la primera fase de la tregua?

El domingo 19 de enero, a las 12:15 del mediodía, entró en vigor el alto el fuego firmado entre Israel y Hamás. El final a más de 15 meses de guerra, desde aquel fatídico 7 de octubre de 2023, y la salida del sol para muchas familias que podrán recuperar un poco de normalidad en sus vidas. Entre ellas, las de los 33 rehenes israelíes que serán liberados por Hamás a cambio de la excarcelación de casi 2.000 presos palestinos.

Las tres primeras rehenes liberadas fueron la joven Romi Gonen, 24 años, que fue secuestrada por los terroristas durante el festival Nova, Emily Damari, 28 años —la única rehén con nacionalidad británica—, y Doron Streinbrecher, 31 años, ambas fueron capturadas en el kibutz Kfar Aza. Ahora, las tres israelíes se encuentran, tras pasar 471 días de cautiverio, junto a sus seres queridos en el Centro Médico Sheba, en Tel Aviv, donde afrontan una lenta y ardua rehabilitación.

Aun así, son muchos más los rehenes israelíes que siguen en manos del grupo terrorista Hamás, y de hecho los familiares de esos 64 cautivos restantes temen que la segunda fase de la tregua no se llegue a implementar, se reanuden los combates en Gaza, y, por tanto, no puedan regresar a casa. De hecho, el ministro de Finanzas israelí, el ultranacionalista Bezalel Smotrich, advirtió de que solo apoyaría el pacto si, tras pasadas las primeras seis semanas, se retomaba la guerra. Al parecer el ministro llegó a un acuerdo con Nentanyahu –se desconocen los términos–para evitar su salida del Gobierno.

En la lista de las 33 personas a las que Hamás liberará en la primera fase del alto el fuego figuran dos niños de dos y cinco años, tres octogenarios y diez mujeres, entre ellas tres soldados israelíes. Israel cree y confía que la mayoría de los rehenes están vivos, pero las familias no han recibido información sobre su estado.

Kfir y Ariel Bibas, que tenían apenas nueve meses y cuatro años respectivamente cuando fueron capturados, se han convertido en el símbolo de la barbarie perpetrada por Hamás en territorio israelí. Según un mensaje de la familia Bibas en redes sociales, desconfían de los informes de liberación y no creerán nada hasta reunirse con los pequeños: «Somos conscientes de los informes que afirman que nuestra familia está incluida en la primera fase del acuerdo, y que Shiri [la madre] y los niños están entre los primeros en ser liberados. Dada nuestra experiencia en decepciones, no consideramos nada definitivo hasta que crucen la frontera», afirman.

Entre los rehenes se encuentra también cinco soldados: Liri Albag, Karina Ariev, Agam Berger, Daniella Gilboa y Naama Levy; cuatro mujeres civiles, tres octogenarios —donde destaca Sholomo Mansour, el más mayor, de 86 años— y nueve rehenes heridos o enfermos. También dos ciudadanos franco-israelíes, Ofer Kalderon y Ohad Yahalomi, un hecho que no ha pasado inadvertido para el presidente de la República francesa, Emmanuel Macron, que lo comentó en sus redes sociales.

Todos ellos forman parte del grupo de 251 rehenes que Hamás capturó durante los ataques del 7 de octubre, de los cuales 94 permanecen en Gaza. De esos, el Ejército israelí da por muertos a 34.

A cambio de la liberación de los secuestrados, Israel se compromete a excarcelar a casi 2.000 presos palestinos, de los que 110 están condenados a cadenas perpetuas por atentados graves. Fuera del acuerdo quedan los terroristas que perpetraron el atentado del 7-O en el que asesinaron a sangre fría a más de 1.200 israelíes y tomaron como rehenes a otros 250. En los 15 meses que ya dura la guerra, solo ha habido una semana de tregua, en noviembre de 2023, en la que Hamás puso en libertad a 105 secuestrados a cambio de 240 presos palestinos.